La sirena de Valdetuéjar se desnuda

e. gancedo | león

«Los ángeles que zelamos el sagrado de este templo/ al que entra le exortamos/ que tema a Dios que está dentro». No es tan fácil descifrar, desde el punto de vista del simple peatón, el significado de esa inscripción embutida en la entrada de la iglesia de San Martín de Valdetuéjar... o las letras latinas que se encuentran justo debajo, y cuya traducción sería: «Ésta es la casa del Señor firmemente edificada, bien cimentada sobre la dura roca. San Martín ruega por nosotros».

Sin embargo, con los modelos en tres dimensiones elaborados por Luis Coya Aláez, resulta muy sencillo estudiar cada uno de los elementos —antiguos, sugerentes, algunos del todo enigmáticos— que conforman el templo, una auténtica joya del románico rural leonés con raíces en el siglo XII.

El fuste que exhibe una serpiente, las basas con cabezas de animales, la extraña imagen sedente, la lápida funeraria, la curiosa figura de la olla en otra de las basas, los canecillos con atlantes, los capiteles con grifos y otros animales reales o míticos, y sobre todo esas sirenas (¿qué hacen personajes marítimos en plena Montaña Oriental leonesa?, se han preguntado algunos) que han hecho famosa a esta airosa iglesia del valle del Tuéjar.

«Ha sido sobre todo durante los meses de abril y mayo cuando se ha estado completando, a través de la plataforma pública Sketchfab, el proyecto El románico de Valdetuéjar en 3D, una colección que agrupa los elementos arquitectónicos más señeros de una de las grandes reliquias románicas de la comarca», explica Luis Coya, quien recuerda cómo el templo, declarado Monumento Histórico-Artístico en 1983, fue originalmente levantado en la segunda mitad del siglo XII y sufrió diferentes transformaciones posteriores.

«Los nuevos recursos tecnológicos han revolucionado de forma muy notable el modo de representar el patrimonio, y de hecho ahora permiten ponerlo al alcance de todo el mundo que disponga de un ordenador, un smartphone o una tablet y conexión a Internet —reflexiona Luis Coya, el autor de los modelos—. En el caso de este proyecto, el usuario puede agrandar, rotar, acercar, alejar y mover en todas direcciones y a su gusto las diferentes piezas para admirar objetos del pasado, que, en su existencia virtual, no son susceptibles de deterioro».

Luis Coya Aláez (Montevideo, Uruguay, 1965), además de director de una oficina financiera en Oviedo, ciudad donde reside, desciende de San Martín por vía materna y en esta localidad del municipio de Valderrueda pasa no pocas temporadas. Es graduado en Geografía e Historia por la Uned y hasta el momento ha confeccionado «quince elementos que constituyen el acervo artístico de este monumento», como resume. «Podemos encontrar en el proyecto las distintas y características sirenas que decoran la parroquia, los típicos canecillos con atlantes románicos, los capiteles y basas historiadas y una lápida funeraria reutilizada, así como curiosas y diversas ornamentaciones en piedra», explica.

Pero, además, en un futuro próximo prevé incorporar los retablos barroco y neoclásico y el aguamanil con los que cuenta la iglesia. Se puede acceder al proyecto y manipular cada uno de los modelos libre y gratuitamente a través de la dirección https://skfb.ly/NoDn.

Del mismo modo, Coya trabaja en el ambicioso proyecto de elaborar, en la misma plataforma, otra colección con las aproximadamente 200 lápidas vadinienses de época tardorromana registradas hasta el momento.

Pero este investigador no sólo se limita al modelado en 3D de elementos patrimoniales sino que, en el marco de lo que constituirá su tesis doctoral, forma parte del equipo del laboratorio de Prehistoria de la Uned de Gijón dirigido por el doctor David Álvarez que analiza el movimiento de grupos humanos prehistóricos en el interfluvio Esla-Cea, cuya presentación en las IV Jornadas de Jóvenes Investigadores del Valle del Duero acaba de publicarse. Se trata de un pormenorizado estudio que pretende arrojar luz sobre un período poco estudiado en esta zona de la montaña leonesa.