Diario de León

Ganadería con solera

Valdellán se prepara para las grandes ferias

La ganadería leonesa de bravo cambia su sistema reproductivo para obtener camadas más numerosas y ampliar el número de festejos

Algunos de los ejemplares de Valdellán que están preparados para ser lidiados esta temporada. DL

Algunos de los ejemplares de Valdellán que están preparados para ser lidiados esta temporada. DL

León

Creado:

Actualizado:

Casi con el comienzo de siglo Fernando Álvarez Sobrado colocaba a León en el mapa de las ganaderías de toros bravos del país. Algo que a día de hoy sigue pareciendo una excentricidad a muchos, pero que año tras año, tras un minucioso proceso de selección en busca del toro que como aficionado busca el ganadero, ha logrado el reconocimiento no sólo de las toristas plazas francesas, donde los astados que pastan en Santa María del Río tienen especial predicamento, sino los premios más codiciados de la primera plaza del mundo, la de Las Ventas.

Los toros de Valdellán, exigentes para el torero pero cada vez más reconocidos por los aficionados, preparan la temporada que ahora comienza con nuevos proyectos tras dos años de pandemia que han dejado también graves problemas en el campo bravo. Por ejemplo, algunos ejemplares destinados a plazas de primera que ahora, con seis años, se lidian en la intimidad de la Dehesa de Valdellán y no podrán ser disfrutados por los aficionados.

Los toros leoneses están anunciados en Vic Fezensac, en el mano a mano entre Antonio Ferrera y López Chaves que será el plato fuerte de la Feria del toro; y llegarán también a Riaza y Sahagún, cita de aficionados a la que la ganadería local no falla. La Granja de San Ildefonso, San Agustín de Guadalix y posiblemente a Zaragoza completan el ciclo inicial previsto entre corridas y novilladas.

Madrid espera

En la temporada de 2022 Las Ventas tendrá que esperar, tras los triunfos logrados en 2018 y 2019

Este año San Isidro no podrá ser, exige reservar un número elevado de ejemplares disponibles con trapío y presencia excepcionales, y el ganadero, junto con la plaza madrileña, ha optado por esperar para no correr el riesgo de no poder ofrecer un encierro completo en San Isidro a la altura que esperan los aficionados.

Que no es otra que la que dejó Carasucia, lidiado en junio de 2019 y que se llevó la mayoría de los trofeos al toro de la feria de aquella última edición isidril celebrada dentro de la normalidad. Que vino a confirmar el triunfo de Navarro, el toro que se alzó con el triunfo en el exigente desafío ganadero que se celebró en Las Ventas en 2018.

De cara al futuro

A la espera de que la normalidad vuelva también al calendario de festejos taurinos, el ganadero de Valdellán está inmerso en un cambio del sistema de reproducción de sus ejemplares, que permita tener camadas más amplias sin renunciar a los exigentes criterios de selección que en sus casi dos décadas de trayectoria le han llevado hasta lo más alto del reconocimiento de los aficionados.

Con alrededor de 450 ejemplares en su ganadería de bravo, y nueve sementales (algunos aún con sus descendientes en pruebas para ver si se ajustan a los criterios que ha fijado para sus ejemplares), el ganadero mantiene firmes los criterios de aficionado que le llevaron a apostar por el encaste Santa Coloma, que no es fácil de comercializar; pero que a la vista de sus últimos éxitos tiene muchos de los componentes que los aficionados exigen recuperar.

Por ejemplo, un juego en el caballo que se ha perdido en la mayor parte de los festejos, y que casi todos sus ejemplares aseguran. Aunque Álvarez Sobrado va más allá. «Buscamos toros completos. Es verdad que es difícil que satisfagan al aficionado, al ganadero y al torero a la vez, pero es el equilibrio que hay que intentar. Buscamos toros que sean bravos y den juego en el caballo, pero tienen que servir también en la muleta. Todo, sin perder la chispa que siempre hemos buscado». Ese ‘picante’ que no todos los toreros admiten, pero en el que cada vez se encierra más la verdad de la Fiesta.

tracking