La Bañeza arrolló al líder pero falló a la hora de definir ante la portería (0-0)

La Bañeza continúa sin conocer la derrota en lo que va de 2004 aunque en los tres encuentros que lleva disputados sólo ha logrado vencer en uno. Ayer, ante el líder Norma San Leonardo los morados tuvieron una oportunidad de oro para sumar los tres puntos pero su falta de definición ante el marco rival les imposibilitó superar a un rival que salvo en los minutos iniciales del choque nunca dio sensación de demasiado peligro. Precisamente los primeros veinte minutos fueron de dominio visitante aunque este hecho no estuvo acompañado de ocasiones de peligro ante el marco de Javi. A partir de ese instante los morados empezaron a igualar el pulso y ya a los treinta minutos dispusieron de una ocasión de oro para romper el 0-0 inicial. Fue Luis el encargado de poner a prueba al cancerbero visitante que, atento, envió el balón a córner. Javi, sólo una vez Quince minutos más tarde Javi tuvo que intervenir para abortar una excelente ocasión visitante nacida en las botas de Luisma. Con empate se cerró la primera parte. En la segunda el panorama en los primeros minutos no varió demasiado siendo los morados los que llevaron las riendas del partido. A los 52 minutos Chevi, en una jugada personal, pudo adelantar a los de Manuel Villanueva pero su envió salió rozando el poste. Tres minutos más tarde un lanzamiento desde fuera del área de Diego Prado a punto estuvo de encontrar su premio pero el portero Óscar estuvo más acertado. En el rechace Guti bien pudo lograr el gol pero nuevamente la falta de acierto en los metros finales de los morados evitó que el marcador cambiara sus guarismos. No obstante La Bañeza dispuso de una ocasión doble a los 64 minutos. Pero ni Diego Prado ni Dani acertaron con las mallas sorianas. A partir de ese momento el partido bajó muchos enteros hasta el punto de que el juego se trasladó exclusivamente al centro del campo y con ello las ocasiones desaparecieron por completo en una y otra área. La Bañeza siguió intentándolo pero se encontró con un rival que hizo de la defensa su mejor arma y con ello el reparto de puntos fue el desenlace de un partido con más emoción que buen fútbol.