«Jugué en el Júpiter Leonés y después en el Badalona cuando tuve que emigrar»

Manuel Ferrajón no sólo es y ha sido un simple aficionado al fútbol y a la Cultural y Deportiva Leonesa, sino que ha practicado de forma activa el mundo del fútbol. Todavía recuerda sus correrías futbolísticas en aquel carismático Júpiter Leonés y después en el Badalona, cuando por cuestiones laborales se vio obligado a irse de León para buscarse la vida. «También jugué algunos campeonatos de empresas en Cataluña, en los que había un gran nivel entre los participantes». -¿A parte de su afición por la Cultural, ha jugado al fútbol? -Mi afición por el fútbol comenzó desde la niñez y como cualquier chaval de aquella época jugábamos en la calle, que es donde más se aprende. Jugué en el Júpiter Leonés y después en el Badalona cuando tuve que emigrar. -¿Por qué marchó de León? -Lo hice por cuestiones laborales, porque marché a Cataluña a trabajar, como vulgarmente se dice a buscarme la vida. Fue cuando jugué en el Badalona y también en un campeonato de empresas, que por aquel entonces eran muy característicos y tenían mucho nivel». -¿Utilizaría alguna táctica con la Cultural actual, al ser una persona que ha visto tanto fútbol? -Creo que Antonio Gómez es un entrenador que sabe lo que se trae entre manos, aunque echo en falta algunas jugadas de estrategia, en el saque de las faltas y cuando se bota algún córner. Pienso que la Cultural debería aprovechar, sobre todo en casa, ese tipo de acciones a balón parado, porque el buen estado del campo le favorece. No tengo la menor duda. -¿A cambio de qué se perdería un partido de la Cultural en el estadio Amilivia? -A cambio de nada, porque para mi un domingo sin fútbol no es domingo. Además, cuando la Cultural juega fuera de casa, siempre me entero del resultado por la radio. Sigo las retransmisiones cuando la Cultural juega lejos de León. Cuando estaba en Cataluña, todos los domingos antes de irme para la cama me enteraba de lo que había hecho la Cultural en esa jornada del campeonato de Liga. ­-Sólo falta que le den la alegría con la que usted sueña... -Y que estoy seguro que se hará realidad en muy poco tiempo.