Un hombre fallecido en Alicante eleva a seis las víctimas mortales de la Dana
efe | madrid
Un vecino de Orihuela (Alicante) de 41 años hallado ayer se ha convertido en la sexta víctima mortal del episodio de gota fría que desde el pasado jueves azota el sureste peninsular, que ha avanzado hacia el oeste en una jornada con nuevos destrozos, inundaciones, evacuaciones y cortes en los transportes.
El hallazgo de la nueva víctima en una zona de campo de la pedanía de La Matanza ha incrementado la cifra de víctimas mortales de una «crisis de protección civil» que, según ha advertido durante una visita a las zonas afectadas el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, aún no ha terminado.
La Vega Baja del Segura (Alicante) ha sido de nuevo una de las zonas más afectadas por la Dana (depresión aislada en niveles altos), cuya situación se vio agravada ayer por nuevos desbordamientos que obligaron a las Fuerzas Armadas a rescatar a más de 450 personas aisladas en municipios y edificios diseminados, especialmente en Orihuela, Dolores, Redován y Almoradí.
«El agua nos ha atacado por todos los frentes», relató el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, que recalcó que la población ha recogido 472 litros por metro cuadrado. Y en Torre Pacheco (Murcia), el desbordamiento simultáneo de tres ramblas obligó a lanzar un nuevo aviso de desalojo a sus vecinos.
En Murcia pudo reabrir el aeropuerto internacional, clausurado el viernes por las lluvias torrenciales, que han obligado al Ministerio de Justicia a poner en marcha un plan de emergencia para garantizar el funcionamiento de los órganos judiciales de San Javier, Molina del Segura y Cieza.
En Andalucía, la gota fría ha dejado más de 700 incidencias, sobre todo en las provincias de Málaga -donde se activó el plan de emergencias por riesgo de inundaciones- y Granada (con 327 y 251 avisos, respectivamente), y puntualmente en Almería (35) y Jaén (32), la mayoría por anegaciones de viviendas, garajes, locales y rescates e incidentes en carretera.
En la madrugada, en Alhaurín El Grande (Málaga) el agua forzó el desprendimiento de muros, arrastró coches hasta cien metros y arrancó la tubería de la pedanía de Villafranco del Guadalhorce. Según confesó la alcaldesa, Toñi Ledesma, la situación ha sido «de caos total».
En Málaga cayó la cubierta de un pabellón polideportivo en construcción y un ficus centenario, mientras que en Huércal (Almería) la Policía Local rescató a dos personas sorprendidas por la acumulación de agua en la autovía A-350.
Los efectos del temporal también se han dejado notar en Castilla-La Mancha, donde once personas han sido rescatadas, una de ellas una bebé de once meses, y han permanecido cortadas en la provincia de Albacete varias carreteras.
Los aeropuertos del Levante han podido operar con normalidad, toda vez que ayer se reabrió el de Murcia, cerrado el viernes a causa de las lluvias torrenciales, mientras que el transporte ferroviario sigue cortado en algunos puntos en la Comunidad Valenciana y en Murcia.