Los líderes de la UE fracasan en la negociación del primer presupuesto sin Reino Unido

La cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se enfrentaba a la primera gran negociación de la era posbrexit , la del presupuesto de la UE para 2021-2027, había entrado en barrena el día 14, cuando el presidente del Consejo Europeo presentó una propuesta que no gustó a nadie. Y ayer, en torno a las ocho menos cuarto de la tarde, después de unas 28 horas de discusiones, una galaxia de encuentros bilaterales, trilaterales, cuatrilaterales... y una oferta técnica de recurso que tuvo escaso recorrido -el último agujero negro-, se consumó el fiasco. Absoluto. Porque ni siquiera hay fecha para la próxima cumbre. Así que vuelta e empezar.

Charles Michel y Ursula von der Leyen, no sabían por dónde salir. En la rueda de prensa que ofrecieron hubo alguna respuesta titubeante, incomodidad y el vano intento de convencer de que la cita había servido para algo. «Hemos visto que no era posible llegar a un acuerdo. Pero los datos estaban ahí y había que entrar en el debate político. Ha permitido aportar claridad y entender de forma precisa» las pretensiones de los Estados miembros, aseguraba el belga.

Michel sabía que la batalla del presupuesto plurianual (o MFF por sus siglas en inglés) no se ha resuelto en solo una cumbre. Y que se enfrentaba a diferencias gruesas que no había limado antes de ir al Consejo.