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Las Cajas Rurales apoyan el bono del turismo como revulsivo para el sector

La Junta firma con las entidades bancarias este estímulo para subir las visitas desestacionalizadas

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Un bono turístico con descuentos en productos y servicios pretende impulsar la demanda a corto plazo del turismo fuera de temporada, con el fin de ayudar a la recuperación de un sector severamente afectado por la pandemia de coronavirus. Impulsado por la Consejería de Cultura y Turismo, con la colaboración de la Unión de Cajas Rurales de Castilla y León, este bono consiste en una tarjeta nominal, personal e intransferible, que podrá ser solicitada desde mediados de septiembre y utilizada, una vez obtenida, hasta el 31 de mayo de 2022.

La desestacionalización del turismo «es uno de nuestros compromisos, la reactivación de la demanda dentro de esos ‘periodos valle’ que coinciden con el invierno», ha explicado este lunes en Valladolid el consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, durante la presentación de esta tarjeta prepago que carece de chip y no precisa de contraseña (pin).

La primera de las dos modalidades en que se estructura este bono es la Tarjeta Disfruta, financiada al cincuenta por ciento entre el usuario y la administración autonómica, y que podrá utilizarse en cualquier establecimiento hotelero y hostelero.

En la Tarjeta Disfruta Plus Agencias, segunda y última variante, las arcas autonómicas financian el 60 por ciento de los paquetes turísticos solicitados por el usuario a las agencias de viaje.

Apoyo

Se habilitan unas tarjetas de apoyo con 250, 500 y 700 euros para financiar la estancia

En ambos casos, las tarjetas podrán ser solicitadas con tres importes: 250, 500 y 700 euros, y también es común la exigencia de al menos una noche de alojamiento para poder disfrutar de sus ventajas.

El consejero ha precisado que sólo podrán ser utilizadas en los establecimientos y actividades adheridas al bono: hoteles, apartamentos turísticos, alojamientos de turismo rural, cámpings, albergues en régimen turístico, restaurantes, salones de banquetes, cafeterías, bares, actividades de turismo activo, agencias de viaje y guías de turismo.

En el reverso de la tarjeta, cuya solicitud no implicará ningún tipo de vínculo con las cajas rurales colaboradoras en esta iniciativa, figurará un código QR con los establecimientos adheridos, información que también podrá consultarse en el Porta de Turismo de la Junta de Castilla y León.

La expedición de la tarjeta (supone un compromiso de gasto por parte del beneficiario al menos en la parte que este aporta, a partir del cual la Junta pone a disposición el resto en concepto de subvención.

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