Los escarabajos de la comida del Hospital no ‘atragantan’ a Serunion

Las larvas que quitaron el hambre a una médica de guardia del Hospital de León el pasado 29 de octubre, al encontrarlas en su plato de sopa, no ‘atragantarán’ a Serunion. La adjudicataria ha sido exonerada en la investigación que efectuó el servicio territorial de Sanidad de la Junta en León, al considerar que fue un hecho «puntual y único», porque no se encontraron más gorgojos en los fideos, el caldo ni el almacén.

Y, sobre todo, al señalar que los bichos son «inocuos» para la salud humana. Unas conclusiones que coinciden con el informe encargado por la propia adjudicataria de la cafetería del personal hospitalario a un laboratorio externo, según hizo público ayer.

El laboratorio ratifica que fue un «hecho único y puntual». Según Serunion, los resultados coinciden con los realizados por el Instituto de Salud Carlos III de la inspección sanitaria de Castilla y León, e indica que la larva encontrada en la sopa es un Tribolium sp., un coleóptero de la familia Tenebrionidae, que son los escarabajos más extendido en el planeta, vinculado a alimentos relacionados con la harina, por lo que «la hipótesis más plausible sería que se encontrase en la pasta».

El informe microbiológico de la muestra testigo que analizó el laboratorio independiente señala que la sopa de ese día «tiene una total ausencia de microorganismos patógenos y presenta las máximas condiciones de inocuidad, es decir, que está libre de cualquier elemento que pueda representar un riesgo para la salud de las personas».

Serunion explica que, de forma preventiva, una de las primeras acciones tomadas por su personal fue retirar la partida de pasta que se usó ese día para la elaboración de la sopa, «si bien la inspección de Sanidad no detectó incidencias en el resto de la pasta ni en otras revisadas exhaustivamente durante sus investigaciones», matiza. La empresa recuerda que tras realizar dos visitas a las instalaciones de cocina, Sanidad tampoco «detectó indicios de presencia de plagas ni en el almacén ni en el resto de las instalaciones y confirmó el buen estado de las mismas». Tras el incidente, la Junta efectuó dos inspecciones exhaustivas de todas las instalaciones y «vio que se cumplen todos los procedimientos exigibles».