Investigan una ola de asaltos en viviendas de familias que se encontraban de vacaciones
Parte de los asaltos se localizan en La Lastra y según la policía, son similares a otros años
Una vivienda ubicada en el barrio de La Lastra. FERNANDO OTERO
El Cuerpo Nacional de Policía investiga la aparición de una creciente ola de robos en domicilios de personas que se encuentran fuera de las viviendas disfrutando de las vacaciones y que han sido objeto de asaltos en las últimas fechas. Compañías de carácter privado dedicadas a la instalación de alarmas han confirmado este extremo, que la Policía niega como extraordinario y que incardinan en el marco de la delincuencia habitual en esta etapa del año.
Los ladrones actúan siempre de forma audaz y componen una pequeña banda que se dedica a este tipo de asaltos. No se trata de grandes golpes ni de casos especialmente espectaculares, pero sí provocan una serie de daños de cierta importancia y el consiguiente quebradero de cabeza para los moradores de las viviendas, que tienen que hacerse cargo de las consecuencias de los robos.
Ubicación
Una parte importante de los mismos se localiza en el entorno de La Lastra pero el resto se ubican en barrios de la periferia de la capital. De la oleada de actuaciones delictivas que se han detectado parece librarse de momento la zona centro, aunque no se descarta que puedan denunciarse otros casos en la recta final del periodo vacacional.
Fuentes de las investigaciones policiales emprendidas a este respecto señalan que la cifra de casos registrados es similar a la de años anteriores, por cuanto no se detecta un aumento de la actividad en esta modalidad.
Los robos con fuerza en los domicilios bajaron de 125 a 113 en el primer trimestre del año según el balance publicado por el Ministerio del Interior. El descenso de casos supone un recorte del 9,6% en la referencia con el mismo mes del año anterior, signo de la tendencia a la baja que se registra en el cómputo del año.
Legislación
El artículo 241 del Código Penal recoge un tipo agravado respecto del tipo básico de robo con fuerza en las cosas cuando se cometa en casa habitada, edificio o local abierto al público o cualquiera de sus dependencias, castigando estos hechos con pena de prisión de dos a cinco años.
El apartado tercero del artículo 241 señala expresamente qué se entiende por dependencias de casa habitada o edificio, entendiendo por dependencias sus patios, garajes y demás departamentos o sitios cercanos, contiguos y en comunicación interior con él y con el que formen una unidad física.
Por acuerdo del Pleno no Jurisdiccional de la Sala Segunda del Tribunal Supremo de 15 de diciembre de 2016, declara que: «los trasteros y garajes comunes sitos en edificio de propiedad horizontal, donde también se integran viviendas, tendrán la consideración de dependencia de casa habitada".