El nivel del Torío lastra la búsqueda del desaparecido

Tras más de dos horas de intensa búsqueda en las gélidas aguas ayer del río Torío, los bomberos de León tuvieron que suspender de la búsqueda de un hombre al que su familia no localizaba desde el lunes por la tarde. Un paseante dio la voz de alarma ayer por la mañana después de observar a un perro atado a un árbol en la margen de Puente Castro, al lado de algo de ropa.

Al lugar indicado se desplazaron agentes de la Policía Local y miembros del cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de León que rápidamente iniciaron la búsqueda del hombre dentro del agua. Al lado de la mascota, el desaparecido había dejado su calzado, algo de ropa y las llaves de su coche y el teléfono móvil.

El lugar en el que se localizaron las prendas y el teléfono del desaparecido está próximo al punto de atención al peregrino, donde el alcalde, José Antonio Diez, tenía un acto a media mañana, por lo que después se acercó hasta la zona de búsqueda. Los bomberos comenzaron la búsqueda del hombre en la misma zona, donde hay un pequeño azud.

Poco a poco fueron peinando el margen de riego, tocando el fondo del cauce y vigilando entre la espesa vegetación que crece en ambos márgenes sin éxito. Así, palmo a palmo, cuatro bomberos de León llegaron hasta el cruce en el que río Torío y el Bernesga confluyen, bajo el puente de la ronda Sur. A partir de ahí, el cauce se hace más intenso y los bomberos tuvieron que salir del agua y suspender la búsqueda ya pasada la una y media de la tarde, además de que se excedían del término municipal de León. Tan sólo les quedó una zona por peinar, en la que el fondo del río es más profundo.

Por la tarde, los agentes de la Policía Local, según apuntaron desde el parque de bomberos, continuaron peinando la zona y llevando un rastreo visual tanto en el cauce del río como en sus márgenes para intentar localizar al hombre desaparecido desde la tarde del lunes.