Diario de León

Ford Mustang. Cabalgando… las llanuras

Los nuevos coupé y convertible elevan el atlético listón del incombustible Mustang. frd

Los nuevos coupé y convertible elevan el atlético listón del incombustible Mustang. frd

Publicado por
León

Creado:

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JAVIER FERNÁNDEZ

Atlético… y visceral. La transformación que ahora propone el ‘óvalo’ para el coupé deportivo más vendido del mundo (10 millones de unidades en 58 años de vida comercial) se centra, no sólo en una depurada estética, también en la adopción de una rediseñada instrumentación digital y, lo mejor, en un avanzado V8 cde 5.0 litros —Gen IV—, que aumenta significativamente sus prestaciones unido, en la versión GT, al cambio automático de 10 velocidades o al manual de 6 marchas. El Paquete Performance incluye —de serie— llantas de aleación (19 pulgadas), diferencial deportivo de deslizamiento limitado para optimizar la respuesta de tracción (propulsión… naturalmente), frenos Brembo (19 pulgadas) y un escape de válvulas activa, que ofrece sonidos ajustables del motor para adaptarse al escenario de conducción. La opcional suspensión activa ‘MagneRide’ monitoriza, mil veces por segundo, las condiciones de utilización mediante un fluido controlado electrónicamente para adaptar la firmeza de la amortiguación a las condiciones de la carretera.

Hasta seis modos de conducción, interactivos y personalizables, optimizan las prestaciones del nuevo Mustang: Normal, Sport, Deslizante, Drag y Pista2; además de un ajuste específico, con múltiples perfiles, a gusto del conductor.

La guinda… el sistema ‘Rev-matching’ (punta-tacón), que mantiene las revoluciones del motor cuando se acciona el embrague para retener el par máximo entro los cambios de marcha manuales —de serie en el GT—, propiciando aún más precisión al Mustang espacialmente apto para la pista.

En una suerte de combinación pasado/presente/futuro, detrás de la icónica silueta del Mustang, que cumple ya su séptima generación, el conductor (devenido en ocasional ‘piloto’) encuentra el más avanzado panel digital que se haya montado nunca en un Mustang: el tradicional salpicadero deja paso —sitio— a una zona central abierta, fluida y acristalada, repleta de tecnología; justo detrás del volante, de fondo plano y aro grueso, se aloja el cuadro de instrumentos digital (12,4 pulgas), que puede personalizarse para mostrar diversos diseños, además de unos también novedosos cuadros de mando en función del modo de conducción elegido.

Un cuadro digital que fluye, inclinado hacia el conductor, en posición marcadamente ergonómica, proporcionando así una clara información visual y con controles fácilmente accesibles… «una experiencia digital envolvente», la define el fabricante.

Tanto los indicadores del cuadro de mandos como la iluminación ambiental, pueden configurarse en los tonos elegidos por el cliente, mientras que los cuadros de instrumentos se adaptan al modo de conducción seleccionado. Con la elección de los ajustes seleccionados del modo de conducción se muestra, en el panel central, una visualización en 3D de la configuración del coche —‘Unreal Engine 3D’—, un motor de juegos de ordenador que produce representaciones en tiempo real; al interactuar con la pantalla táctil, pueden incluso deslizar el gráfico para girar el coche virtualmente.

Paralelamente, las novedades interiores también se centran en los asientos de cuero, como el volante, y plásticos de tacto suave en el panel de instrumentos y en el de las puertas. En los modelos con acabados superiores, puede elegirse el color de los pespuntes del volante y unas exclusivas perforaciones en la tapicería de la consola central, que incorpora una almohadilla de carga inalámbrica para el teléfono portátil, y se complementa con una franja asimétrica en tono combinado con los cinturones de seguridad.

En el plano puramente estético, esta séptima entrega del Mustang reinterpreta el clásico frontal de los años 60, bajo y horizontal, de su característico capó de tres secciones, que ahora se alinea con los nuevos faros LED, creando un inconfundible —y modernista— aspecto visual.

Por primera vez, cada acabado de la gama Mustang adopta su propio frontal; en el caso del GT, corazón de la marca Mustang, presenta una generosa parrilla —mayor flujo de ventilación—, mientras la aerodinámica general del coche también se ha visto optimizada merced a la incorporación de nuevas rejillas de ventilación en el capó, además de un rediseñado ‘splitter’ delantero.

A cielo abierto… la arquitectura convertible del nuevo Mustang continúa escrupulosamente el legado de máxima libertad al aire libre: un sencillo accionamiento del pestillo central de un solo tirador —solamente un toque—,, abre y cierra la capota de tela, totalmente forrada y aislada.

Tanto el diseño compacto del techo como de la suspensión trasera independiente, permiten ofrecer un maletero tan considerable para un descapotable, que puede albergar el equivalente a dos bolsas de palos de golf.

Bajó el capó, un nuevo encapsulado del motor, un refuerzo negro de torre a torre de amortiguación y una renovada insignia; además, unos conductos de cables, combustible y frenos más ordenados, contribuyen a mejorar la estética del corazón del Mustang.

Una docena de tonalidades conforman la paleta de nuestro protagonista, incluyendo tres nuevos colores: los llamativos Azul Ember, Azul Vapor y Amarillo Splash. También puede elegirse entre el negro y el rojo para las pinzas de freno Brembo, todas ellas con el logotipo de Mustang, además de poder elegir entre dos nuevos diseños de llantas de aleación (19 pulgadas).

Tanto el coupé como el convertible, vienen equipados con funciones de asistencia al conductor de última generación en Ford: reconocimiento de señales de velocidad, control de crucero adaptativo inteligente con función arranque/parada, asistente de centrado de carril, dirección asistida evasiva y el asistente de frenado en marcha atrás.

Otra clave es la suspensión activa, que monitoriza continuamente las suspensiones, el chasis, la dirección y la frenada, optimizando sus respuestas.

Dark Horse… pasión por los circuitos. Junto con la versión GT, debuta el Mustang Dark Horse, como la máxima expresión de uso en circuitos, cultivando —eso también— la filosofía marcadamente deportiva del fabricante; animado por la versión más potenciada del nuevo V8 de 5.0 litros (Gen IV), con nuevos árboles de levas y una puesta a punto específica, unido de serie al cambio manual de 6 velocidades —bola de palanca en titanio—, o a la caja automática de 10 marchas —levas en el volante—. Esta exclusiva versión, ofrece de serie el Paquete Performance, que monta diversas aflicciones para cumplir con la capacidad de «sprint en pista»: chasis más deportivo, barras estabilizadoras traseras más grandes, amortiguadores delanteros de alta resistencia, frenos delanteros Brembo sobredimensionados y neumáticos Pirelli P Zero PZ4.

Por si faltaba algo… freno drift electrónico desbloquea la capacidad de derrape de la propulsión trasera del Mustang, con el atractivo visual y la funcionalidad de un freno de mano mecánico tradicional. Este freno de mano electrónico, está diseñado tanto para que los conductores noveles aprendan —o perfeccionen— sus habilidades de ‘drifting’, como para proporcionar a los expertos un sistema preparado para la competición.

Y lo mejor… la llegada de la versión Dark Horse, sienta las bases para el retorno del Mustang al escenario de las competiciones internacionales, incluyendo GT3, GT4 y NASCAR.

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