DMD León pone reparos al papel de la Comisión de Garantías
El Grupo DMD (Derecho a Morir Dignamente) de León valoró la aprobación de la ley de eutanasia, con 198 votos a favor, 138 en contra y dos abstenciones de PP, Vox y UPN, como «un avance muy importante en nuestro derecho a una muerte digna».
DMD señala que hay aspectos que deberán ser revisados en el futuro pues el plazo para poder aplicar una eutanasia será. como mínimo, de dos meses. La Comisión de Garantías, en manos de lasa comunidades autónomas y comités de Bióetica, es la que suscita más recelos. «En razón a su configuración DMD teme que en algunas comunidades se pueda interpretar la ley anteponiendo las creencias personales de los miembros de la Comisión a la voluntad reiterada de morir de la persona que solicita ayuda», señala un comunicado hecho público ayer por el grupo DMD León.
«La experiencia de Países Bajos, Bélgica y Canadá demuestra que el control posterior es suficientemente garantista», añade.
El grupo valoró que sea de financiación pública y se pueda llevar a cabo en centros sanitarios privados, públicos y en el domicilio. Recuerda que se trata de un derecho y no de una obligación y aprueba que por encima de la objeción de conciencia de profesionales prime el derecho de la persona. Tampoco es incompatible, advierte, con el derecho a los cuidados paliativos de toda persona. «Nuestra gratitud a todas las personas que con su entereza y trabajo, a pesar de las muchas dificultades, han conseguido que a día de hoy hayamos alcanzado el derecho a una muerte digna».
Igea: «horror o suicidio»
El vicepresidente de la Junta Francisco Igea mostró su oposición a la ley, pese a que Cs la apoyó en el Congreso, con duras declaraciones: «No da alternativa entre el horror y el suicidio», aunque en Castilla y León espera que sí la haya con la ley autonómica complementaria.