Diario de León

Construcción eficiente

La casa del futuro está en el Húmedo

La primera ‘passivhaus’ de la capital es un alojamiento turístico El edificio ahorra un 70% de energía gracias al aislamiento y la hermeticidad.

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ana gaitero | león
León

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Consumo bajo, cero emisiones y alta confortabilidad. Son las tres características de la passivhaus. La casa del futuro. Una vivienda pasiva que es muy activa en ahorro y salud. Se construye en el corazón de León y será habitada en pocos meses por turistas.

Por fuera parece un edificio normal, pero es de madera. Es la segunda piel que la envuelve y aisla del mundanal ruido y sobre todo de las termperaturas. Un hito para climatologías como la leonesa. Por dentro esconde un sistema de tuberías que actúan como un pulmón y muchas capas de aislamiento. El interior está revestido con pladur y las ventanas se aislan con triple cristal. Va a ser la casa con menos consumo y más confortabilidad de León.

Se trata del alojamiento turístico —dos apartamentos y dos estudios— que promueve la leonesa Blanca Santamaría en la calle Panaderos número 14. El Barrio Húmedo tendrá el primer establecimiento hotelero de Castilla y León y uno de los primeros de España construido con la técnica passivhaus. Son dos estudios y dos apartamentos con capacidad para entre 2 y 4 personas cada uno. El concepto lo acuñaron hace 30 años el sueco Bo Adamson y el alemán Wolfgang Feist del Institut für Wohnen und Umwelt (Instituto de Vivienda y Medio Ambiente). Hoy es la forma más novedosa de construcción, en la que España empieza a despuntar, cuyo fin es «obtener un consumo casi nulo», explica Santamaría.

La clave para que no haya pérdidas de calor por las ventanas, puentes térmicos y muros son los aislamientos y la hermeticidad. Cuenta con un sistema de ventilación mecánica —el pulmón— controlada por un recuperador de calor cuya función es renovar el aire continuamente. De esta manera, la vivienda alcanza un alto nivel de confortabilidad y es muy saludable, apostilla la promotora.

Tanto la climatización como el agua caliente se producen por aerotermia, una tecnología limpia que extrae el 77% de la energía del aire. Este sistema, basado en una bomba de calor, garantiza una temperatura homogénea en cualquier zona de la casa y a su vez la ventila constantemente con aire muy limpio filtrado previamente por los recuperadores de calor. El estándar de esta edificación prohibe temperaturas inferiores a 17ºC.

Como prestación diferencial a otros establecimientos ofrece una confort acústico añadido por los aislamientos. La idea es añadir otro tipo de tecnologías como las audiovisuales, domóticas, cerraduras inteligentes para ofrecer el máximo de prestaciones con la máxima eficiencia.

Se estima que las viviendas passivhaus consumen hasta un 70% menos de energía que las convencionales. El sello Passivhaus, que la vivienda hotelera de León conseguirá en Alemania, exige limitaciones en la demanda de calefacción (ha de ser menor o igual a 15kWh/m² año) y en la demanda de refrigeración (siempre menor o igual a 15kWh/m² año). Asimismo, la energía primaria utilizada por la edificación ha de estar en un máximo de 120kWh/m² al año y se establece como requisito indispensable la práctica ausencia de infiltraciones de aire (por debajo o igual a 0,6 renovaciones/hora a 50 Pa), según la Plataforma de Edificación Passivhaus.

Blanca Santamaría, que gestiona la pensión Blanca B&B en la calle Villafranca, compró una casa en el Casco Antiguo a principios de los 90. Quiso hacer un proyecto hotelero, pero la vida la llevó a emigrar a Gerona. Hace unos años un primo le habló de las passivhaus que había visto en Austria.

Desempolvó el proyecto del hostal y se puso a investigar sobre la viabilidad de llevarlo a cabo con el sistema de passivhaus. A través de la Plataforma Española de Edificación Passivhaus (PEP) se pone en contacto con empresas, sobre todo del País Vasco, que trabajan con el sistema. «Cada vez me iba pareciendo más interesante poder construir ‘bien’», explica.

lentitud de la administración

La tramitación administrativa ha sido lo peor. Un calvario. «Ahora entiendo que muchos emprendedores dejen los proyectos a medio camino», señala. Dos años para conseguir la licencia medioambiental y que «alguien se olvidó de enviar el proyecto a Patrimonio» (obligatorio al ser en el Casco Histórico) han retrasado la obra, que finalizará previsiblemente en primavera. Control arqueológico, gestiones en Aguas de León e inscripción de la obra nueva en el Registro de la Propiedad no le han permitido ir pedir el crédito hipotecario hasta el 20 de diciembre. Está a la espera de que se lo concedan.

Que sea un proyecto «innovador y beneficioso» para la ciudad no ha facilitado las cosas como cabría esperar. Para colmo, cuando ya había pagado los 2.500 euros de la licencia sale el decreto que exime de esta tasa a todas las nuevas empresas, explica la promotora.

El Instituto Passivhaus (PHI) en Darmstadt, Alemania, es el que ha desarrollado el Estándar Passivhaus basándose en investigaciones y pruebas científicas, según indica la PHP. Esta asociación se creó en España en 2005 y ha sido clave en el impulso de este sistema, al que la directiva sobre eficiencia energética avala al exigir que a partir del 31 dediciembre de 2020 todos los edificios sean de consumo casi nulo. Para los públicos se acabó la moratoria el pasado 31 de diciembre de 2018. Y es que las viviendas son responsables del 40% del consumo energético.

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