El universo de Vega de Seoane en Villafranca

La pintura de Eduardo Vega de Seoane (Madrid. 1955) es la historia de su vida. «He llegado a convertirme en artista a través de mi propia búsqueda personal», confiesa. Renunció a convertirse en un experto en economía para viajar fuera de España y estudiar cine, en 1976, cuando el país despertaba a la democracia.

En Estocolmo y Amsterdam, Suecia y Holanda, descubrió que «lo que quería era pintar» mientras estudiaba diferentes disciplinas artísticas. Y volvió a Madrid. Durante cinco años, dos con beca, estudió en la Escuela Arjona bajo la dirección de María Luisa Arjona.

Los viajes que hizo por Irán, Afganistán, Pakistán e India, en trenes y autobuses, le dieron la libertad que buscaba como pintor. Y una intención que ha permanecido: «Transmitir energía».

Un pedazo del universo de Vega de Seoane se puede ver hasta mediados de septiembre en la galería de arte del Palacio de Torquemada de Villafranca del Bierzo. Las fiestas del Cristo marcarán el fin de la temporada en este espacio expositivo que Ignacio Ferrari y Paloma de Villota han creado en el pasillo que conduce a la bodega de esta casa palaciega que es un referente del barroco del siglo XVII.

Con Vega de Seoane, la Galería de Arte Palacio de Torquemada mantiene la apuesta por las firmas consolidadas en alternancia con la apertura de la sala a las nuevas tendencias y generaciones, como la reciente exposición fotográfica de Sandra Zobel o la muestra del colectivo Nosotras antes de la pandemia. El pintor expresionista crea una atmósfera para que el público sumergirse, volar y soñar.

El color, la escritura espontánea, las formas que van surgiendo como por arte de magia, como las nubes que se forman en el cielo son la materia que a lo largo de los años han dado personalidad a este artista. Los nombres de sus cuadros plasman la sencillez y profundidad de la obra. Títulos que se refieren al aire, a la tierra, al viento, a la montaña, hablan de escribir, de navegar, de soñar.

«Es una pintura para dejarse ir, para soñar y participar en la creación. Son escenarios abiertos que invitan a entrar en ellos dándoles nuestra propia lectura. No hay un solo significado son obras abiertas a nuestra imaginación», explica el artista.

Eduardo Vega de Seoane ha realizado varias exposiciones en los últimos años en la Zsart Gallery de Viena. En la inauguración de la muestra que ahora se puede ver en el Palacio de Torquemada estuvo acompañado por el pintor berciano Luis Gómez Domingo, entre otros.

Eduardo Vega de Seoane es un pintor con una ya dilatada trayectoria a lo largo de la cual ha presentado más de 60 exposiciones individuales en galerías nacionales (entre otras la galería Ármaga de León) e internacionales y ha participado en ferias internacionales como ARCO, Art Chicago y Viena Art Fair.

En cuanto al estilo de su pintura él prefiere calificarlo como de carácter libre. A través de su obra pretende sobre todo despertar emociones, sensaciones y sentimientos en las personas que la contemplan. Algo así como las experiencias que provocan la poesía y la música.

La crítica austríaca Clara Kaufmann se refiere así a su pintura: “La mezcla de impresiones sensoriales concretas y sensaciones abstractas, aunque muy reales también conduce a una simultaneidad de representación y abstracción en la pintura. Porque por más abstractas que puedan parecer sus pinturas siempre desencadenan asociaciones representativas, por ejemplo o en parte también en la forma en que compone sus superficies de color. La música cuenta historias desde notas, acordes, armonías y finalmente vibraciones, Eduardo cuenta historias desde o sobre colores, formas y signos”.

Por otra parte la escritora Anna Zanco opinaba así sobre la obra de Vega de Seoane: "La espontaneidad da impulso al acto creativo, el que va a dar paso al rechazo de dejarse encasillar dentro de una determinada categoría. Abstracto y figurativo coexisten en su trabajo hasta firmar una armonía total".

La muestra que se exhibe en la sala de exposiciones del Palacio de Torquemada de Villafranca del Bierzo ofrece una panorámica de los trabajos realizados por el artista en los últimos años y se compone de pinturas sobre lienzo y sobre papel, junto a obra gráfica.