Una ventana a la salida de los trenes

Una ventana para que se asome al tren el barrio leonés que no se lo quitó de la vista en el último siglo; una solución urbana definitiva que delimita un extremo el área de soterramiento; una ventana al tren que sale y entra por el oeste, el tren que vuelve al norte, justo sobre el emboquille del túnel de acceso a la estación pasante de León, que recrea la entrada ferroviaria sobre un entorno urbano bien distinto ya a aquel del paso a nivel, la bajada de barrera, el trasiego de los convoyes en tropel y las eternas retenciones de cada día.

Esa ventana de base de forjado es un antes y un después a la vera de la calle Doctor Fleming, que se asomará al tren sin la preocupación de quien sabe que no tendrá que salvar los raíles para compaginar su vida cotidiana.