La familia española residente en Gaza llega a Madrid

La sevillana María Blasco ha llegado hoy a Madrid, tras ser evacuada de la franja de Gaza donde residía con su marido y sus dos hijos, y ha pedido a los españoles que ayuden al pueblo palestino que vive una situación "muy trágica, de la que difícilmente se recuperará".

Blasco ha volado a Madrid en un avión de Egypt Air con sus familia y el documentalista Alberto Arce y han sido recibidos en el aeropuerto de Barajas por personal de la Cruz Roja y del Ministerio de Asuntos Exteriores, que se ha encargado de coordinar la operación de evacuación.

La Directora de la Unidad de Emergencia Consular del ministerio, María Victoria Morera Viruendas, ha indicado a Efe que en un par de días "y si todo va bien se traerá a los cerca de cincuenta españoles que se encuentran en el norte de Gaza y que han comunicado su deseo de venirse a España".

Sobre la salida de la franja de Gaza, María Blasco ha relatado que el pasado domingo recibieron la llamada del cónsul de España en Jerusalén, quien les comunicó que se personaran en el paso de Rafah (fronterizo con Egipto), donde les asistió el embajador en El Cairo, al que ha agradecido las gestiones realizadas.

Anteriormente lo habían intentado cinco veces, pero fue imposible porque "las carreteras estaban cerradas, había tanques por todas partes, bombardeos, cañonazos..etc. Era horrible, había cosas blancas, que decían que era fósforo blanco", recuerda Blasco.

Blasco ha pedido ayuda a los españoles para rehacer su vida en Madrid, donde se establecerá en casa de unos familiares, ya que ha asegurado que no van a regresar a la franja de Gaza.

En este sentido, su hija, Halima, de 23 años y estudiante de filología en la universidad de Gaza, ha asegurado que "cuando termine todo esto, nada volverá a ser como antes", mientras recordaba que ha pasado casi un mes "sin ver el sol metida en casa sin agua, ni gas, ni comida".

Halima ha expresado su tristeza por "la gente que se ha quedado allí" y ha destacado que durante este último mes ha sufrido mucho por su hermano, Nizar de dos años.

El marido de María Blasco es un antiguo funcionario de la Autoridad Nacional Palestina, que perdió su trabajo cuando Hamás se hizo con el control de la franja en junio de 2007 tras varios días de enfrentamientos con los nacionalistas de Fatah.