Editorial | Una propuesta que debe ser estudiada
El paisaje de las canteras de pizarra y la arquitectura industrial que rodea a esta actividad han sido reconocidas en Gales como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Un escenario muy similar al de las explotaciones del Bierzo y La Cabrera, aunque de momento nadie se ha planteado en la provincia impulsar una candidatura similar.
El reconocimiento por parte de la organización de las Naciones Unidas no sólo implica poner en valor las cicatrices en el territorio de una forma de vida en la comarca, sino que supone un importante impulso de este oradado paisaje como recurso turístico. Como lo son hoy Las Médulas, también minas en su origen.
La iniciativa británica es un ejemplo a seguir por León. El recurso pizarrero puede ir mucho más allá del ámbito minero.