Por una educación con rasgos analíticos

En mi artículo publicado en este mismo diario, y titulado de igual manera el día 03/01/2015, rescaté unos párrafos de Melanie Klein que reproduzco a continuación: “…Cuando en nuestro trabajo analítico vemos a cada rato cómo la descomposición de la ansiedad infantil prematura no sólo aminora los impulsos agresivos del niño, sino que conduce a un empleo y satisfacción mas valiosos de ellos, desde el punto de vista social; cómo el niño muestra un deseo continuamente creciente, profundamente arraigado, de ser amado y amar y de estar en paz con el mundo que lo rodea; y cuanto más placer y beneficios, y que disminución de la ansiedad, extrae de la satisfacción de dicho deseo, cuando vemos todo esto, estamos dispuestos a creer que lo que ahora podría parecer un caso de cosas utópico, llegará a darse en realidad, en los días todavía lejanos en que, así lo espero, el análisis infantil llegue a constituir una parte de la educación de cada persona, como lo es ahora la educación escolar. Y quizás entonces la actitud hostil que surge del temor y la suspicacia, que se encuentra en estado latente, con mayor o menor fuerza, en todos los seres humanos y que intensifica en ellos, multiplicándolos por cien, todos los impulsos de destrucción, cederá su lugar a sentimientos mas bondadosos y confiados, y los hombres podrán habitar el mundo, todos juntos, mas pacíficamente, y con mejor buena voluntad recíproca de lo que pueden hacerlo ahora» (Melanie Klein, O.C. vol I , pag 262, línea 26. El desarrollo temprano de la conciencia del niño. Editorial Paidos).

El psicoanálisis puso de manifiesto que el “primus mobile” de la conducta humana, es el inconsciente, que resulta desconocido tanto en los ámbitos educativos, como en el ámbito de la política.

La educación ha sido y es uno de los caballos de batalla de todas las sociedades. Ha habido muchas escuelas que ofrecían todo tipo de beneficios, pero ninguna de ellas hizo uso de la Teoría Psicoanalítica, bien por razones temporales, bien por las resistencias aparecidas ante lo desconocido, o bien simplemente por desprecio como consecuencia de su ignorancia.

El Psicoanálisis ha demostrado que el primus mobile, de la conducta humana es el inconsciente, éste es desconocido por los maestros y profesores en sus aulas por lo que les resulta imposible interpretar, los hechos que acaecen tanto en la escuela, como en el aula, siendo la escuela misma la representación simbólica de la madre (de la de cada uno de nosotros), y el aula de la clase, el interior del cuerpo de la madre (de la nuestra, la de cada uno), donde el maestro representa la figura del padre, o la maestra la figura de la madre. Esta situación trae como consecuencia el despliegue no solamente de los conocimientos científicos que se imparten dentro del aula, sino multitud de relaciones emocionales tanto entre compañeros (los hermanos, en términos simbólicos), sino en relación con las figuras paterna o materna, emociones que van desde el odio y desprecio, hasta la admiración y el enamoramiento del profesor o profesora, que deberían ser capaces no solamente reconocerlos como un fenómeno de transferencia, sino que deben contener dichas proyecciones y no devolverlos rompiendo e esta manera el feedback. Esta situación solamente puede ser percibida si el profesor o profesora conoce su propio inconsciente, por lo cual abogo porque una de las condiciones para ejercer la función docente sea la asistencia en tiempo y forma a Sesiones de Psicoterapia Psicoanalítica, al menos durante un año para poder ejercer la profesión.

Evidentemente un médico de cabecera + un cursillo, no capacita en absoluto para ser terapeuta, ni tampoco un psicoanalista que sea aficionado a las peleas de gallos u otra barbaridad por el estilo.

Últimamente oigo a algún político nacional y regional levantar los ánimos sobre la República y consultas.

Que se puede decir a respecto sobre este tema aquí y ahora desde el Psicoanálisis.

El Rey, el nuestro, y el de cualquier país, representa una figura paterna, es el Padre de la Patria.

En nuestra infancia, el deseo sexual dirigido a nuestra madre, era coartado en su fin por la presencia del padre que solamente con su presencia nos impedía la realización de tal deseo, la frustración originada nompudiendo ser soportada nos llevaba a la solución de matar a la persona culpable de tal situación: El Padre ; el niño no tiene conciencia de la irreversibilidad de la muerte, basta conque el padre se ausente para que en su fantasía, la de matar al padre, se halla realizado.

Este deseo es universal, y esto los políticos nacionales lo deberían conocer, la solución pasa por la sublimación del padre.

De la misma forma que he abogado que para la incorporación a la escuela, sea necesaria la asistencia continuada a sesiones de Psicoterapia analítica, al menos durante un año, los políticos de primer nivel deberían exigirles tal condición, y con la misma temporalidad.

En relación con los políticos independentistas, la pregunta inmediata es ¿Cómo es posible que políticos de la CUP, y otros coincidan en el mismo objetivo?

Necesariamente la causa que lo origina es la misma. ¿Cuál?

Cuando de bebés nuestra madre nos da el pecho, de 0 a 6 meses, la percibimos como un objeto: es una cosa que nos da, alimento amor, protección, seguridad, bienestar.

Cuando nos retira el pecho aparece el displacer, la frustración, el odio. Si esta última situación se reproduce en el tiempo, el bebé queda fijado de por vida a esta etapa oral, siendo causa de las temibles enfermedades mentales conocidas como : esquizofrenia, trastorno bipolar, psicosis, en definitiva: La locura.

La separación del pecho materno debe ser realizada como toda separación, con un duelo por el objeto amado perdido, con sentimiento de gran tristeza por aquello que ya no está, de esta forma te reconcilias con el objeto amado, y te lleva a la paz interna.

En el primer caso el bebé establece la ecuación:

—Pecho bueno= madre buena= Cataluña.

—Pecho malo = madre mala = España.

Como el paso desde la posición de objeto parcial a la de objeto total (la madre concebida como un todo), no es total sino que quedan restos de la etapa anterior, dependiendo de la intensidad de la escisión mental del político o independentista, será mas o menos radical en sus posiciones. (en ingles se utiliza el termino splitting).

Si en la escisión mental, está la enfermedad, en la unidad mental o una buena aproximación a la unidad (en términos analíticos los objetos internos coexisten de forma armónica), está la salud y el bienestar.