León-Gijón sin hijuelas deja a la Rampa desolada

Renfe estrenó el servicio de trenes por la nueva vía entre La Robla y Pola de Lena con más de 2.20 billetes vendidos en la primera jornada en la que los Alvia operan en la Variante.

Más de dos mil doscientos usuarios que han convertido las galerías ferroviarias en un foco de atención continuo desde primera hora de la mañana, desde que el madrugador 130 partió de Gijón a las 6.28 horas; el beneficio del trayecto se trasladó de inmediato a los tiempos; antes de las ocho de la mañana, la magafonía de la estación de Adif anunciaba la entrada en vía del Alvia con destino a Madrid procedente de Asturias; entre el pasaje, decenas de incondicionales del ferrocarril, que no quisieron perderse el momento; ex empleados del sector ferroviario, devotos de los trenes, y hasta aventureros urbanos de cercanías, que decidieron llegar a León a desayunar y regresar antes de la diez de la mañana Oviedo. Planes que permite el paso por la Variante, que hasta ayer no estaban al alcance de los mortales que se desplazaban en los trenes del norte.

Para desayunar en León y tomar el aperitivo o el café de mediodía en Gijón no hace falta más que pasar por la taquilla de Renfe. Una hora y veinte minutos de duración en el trayecto de León a la ciudad gijonesa, que se queda por debajo de la hora a Oviedo, es el verdadero salto cualitativo que permite el túnel de 25 kilómetros al trazado León-Asturias, bajo la cordillera en vez de acometer el salto del cordal en la legendaria Rampa.

La rampa desolada, con el regional como único tren del servicio de viajeros ayer en cartel, y con pocas expectativas de mantener la frecuencia. Desolada la Rampa, mientras las operaciones de largo recorrido se han mudado a esa línea recta que hace de la plataforma de Llanos de Alba a Campomanes un suspiro de diez minutos; un repaso a las principales noticias, un carteo por aplicaciones del móvil; una cabezada, hasta que el traqueteo de la vía entre Pola de Lena y Mieres devuelve al pasajero a la cruda realidad.

Renfe ha vendido ya más de 70.000 billetes desde que el 2 de noviembre se pusieran a la venta, cuando se lanzó una campaña promocional de 25.000 plazas con Superprecios desde 18 euros.

La campaña promocional duró 10 días para billetes con fecha de viaje hasta el 15 de febrero de 2024. Las perspectivas son inmejorables. La sabe el Principado de Asturias, que ayer metió en la agenda de su presidente un viaje oficial a León a resolver cuestiones institucionales en la Diputación de León y el Ayuntamiento de León. Adrián Barbón se presentó en el segundo Alvia del día, con una corbata para la ocasión: «No crean que el color es casual; la he elegido con los colores de la bandera de León, por razones obvias; voy a León», confesó el presidente asturiano en un pequeño aparte con periodistas leoneses, tras degustar un café en la cafetería del Alvia, al pie de la entrada en la Variante. Barbón desveló que Asturias espera poder duplicar el número de turistas gracias a la Variante, también esencial para el traslado de mercancías, por el recorte de dos tercios en el coste. «Esta obra no hace más que reforzar los vínculos entre León y Asturias», indicó el presidente del Principado.

La otra cara de este momento efusivo que vive el ferrocarril entre Asturias y León está en la traza convencional.

Desolada desde ayer, y con desolación creciente. El gobierno asturiano cree que no habrá afección por abandono; pero el tramo de León, de la boca sur de la Perruca a esta parte, ya pede de otro hilo que anticipa el cartel de próxima vía muerta en la provincia leonesa. El presidente de la Diputación, Gerardo Álvarez Courel, llegó ayer a afirmar que no cree rentable mantener dos líneas en servicio. La flamante Variante deja a la Rampa de Pajares desolada con el adiós abrupto de los trenes.