«León tiene que apostar por los nuevos desarrollos electrónicos»

—¿Cómo ve el futuro de León?

—Yo nací en un pequeño pueblo de León. La casa de mis abuelos no tenía baño y de ahí he pasado a vivir la llegada del hombre a la Luna, el desarrollo de la inteligencia artificial, el teléfono móvil y otros desarrollos que jamás me hubiera imaginado. No sé como serán las sociedades del futuro, pero entiendo que serán muy distintas a los que ahora tenemos. Será un proceso gradual. No estoy convencido de que los grandes desarrollos del futuro sean los mismos de ahora. Surgirán otros nuevos. Aparecerán nuevas posibilidades que contribuirán al desarrollo. Más de la mitad de la población del mundo lo único que quieren es tener acceso al agua y la comida y dudo que vayan a disfrutar estos grandes avances tecnológicos. En esa incertidumbre no sabemos cuáles serán los próximos puestos de trabajo. León tiene que tener los ojos abiertos para formar a las siguientes generaciones en un ámbito transdisciplinar donde la biomedicina, la economía, la física o la electrónica constituyan la base del desarrollo. Formar a personas flexibles, abiertas y positivas porque la ciencia lucha contra los fundamentalismos. Los fundamentalistas odian la ciencia porque no tiene verdades absolutas.

—Pero la juventud se va, León cada vez está más envejecido.

—Lucharemos contra el envejecimiento y seremos más jóvenes. Tenemos que desarrollar esas condiciones de trabajo que fije y estabilice a las siguientes generaciones en una sociedad más rica y tolerante. La inteligencia artificial es una de las piezas fundamentales del trabajo del futuro y León puede contribuir. Zapatero hizo una apuesta en León con el Incibe. León tiene que apostar por los nuevos desarrollos electrónicos.