cartas al director

c Aitor Castañeda Zumeta escribe una carta de ‘Enhorabuena a Luis Mariano Santos’: «Conocí a Luis M. Santos en agosto de 2012. Había ido a pasar unos días a León (ciudad) y me encontré por vez primera con una sede de la UPL. Yo, que soy vasco, por entonces no estaba del todo al tanto de la realidad política leonesa, y como desconocía aquella formación subí a su sede a preguntar. Santos, que entonces ejercía de Secretario de Organización del partido, estaba allí. Me atendió con paciencia, respondió a mis preguntas y me regaló una bandera de la Región Leonesa que aún conservo.

Aquel hombre que conocí por casualidad se estrenó como procurador por León en las autonómicas del 2015 (19.067 votos). Se mantuvo asimismo en las del 2019 (27.888). UPL resistía con su único escaño en unas Cortes en la que llegó a tener 3 procuradores en 1999, todos ellos por la provincia legionense. Desde entonces no había vuelto a alcanzar esa representación… Hasta hoy.

UPL ha logrado casi 51.000 votos el 13-F, obteniendo de nuevo tres procuradores por León, en cuya capital también ha ganado. Los logros de la formación no son desde luego comparables entre esta provincia —tradicionalmente socialista— y Zamora-Salamanca (PP), aunque el avance de UPL en estas últimas, con 2 574 votos más desde el 2019, es indiscutible.

Sin embargo, el partido no ha igualado sus resultados del 99 (54 158), y no es aún líder en ninguna de las tres provincias. Asimismo, y aunque su lema ruge que conseguirán una comunidad autónoma que mejore el hábitat leonés, los resultados del 13-F hacen suponer que la jaula para ello seguirá bajo llave.

La madrileña Díaz Ayuso, que ha declarado claro su deseo de que el PP, partido ganador del 13-F, pacte con Vox el futuro de Castilla y León ‘sin políticas identitarias’, y que además llamara ‘paletos’ a los leonesistas en su día, necesita una respuesta ‘ad intra’ y ‘ad extra’ del País Leonés. Los vascos hacemos valer nuestros derechos históricos en alusión a nuestros antiguos fueros, pero el Reino de León fue nada menos que la cuna de parlamentarismo europeo, según Unesco (2013). UPL ha recuperado la oportunidad, con Santos al frente, de hacer valer como nunca un ideario que no pocos daban ya por marginal».

c Miguel Ángel Loma Pérez analiza los ‘Tipos de familias’: «Uno de los postulados del progresismo respecto a la familia es que todas valdrían igual: desde la natural constituida por un hombre y una mujer, a las monoparentales con un solo progenitor, las homoparentales con dos personas del mismo sexo, etc. Pero esto no es cierto; al menos en un tema tan trascendental como es la formación y desarrollo integral de sus miembros más débiles: los hijos. Sorprende que el cacareado progresismo, tan acérrimo defensor de la naturaleza, ignore drásticamente la naturaleza humana y siglos de experiencia en todas las culturas de la humanidad avalando la necesaria y complementaria presencia de un padre y una madre para criar y educar a los hijos. Porque una cosa es que estas familias puedan verse afectadas y dañadas en su estructura por graves circunstancias sobrevenidas que causen la ausencia de uno o ambos cónyuges, y otra sustancialmente diferente es constituir voluntariamente una familia excluyendo desde su inicio elementos tan esenciales y fundamentales como el padre o la madre. En todo caso, lo que siempre debería prevalecer y guiar a padres y madres es el interés por el mayor y mejor bien de los hijos; y no la mera satisfacción del deseo de paternidad o maternidad.

c Luis Alberto Rodríguez Arroyo critica los ‘Cínicos mensajes políticos’: «Llaman políticamente la atención los mensajes lanzados por unos y otros tras las elecciones en Castilla y León. ‘Victoria pírrica del PP’, ‘El PP queda en manos de Vox’, ‘El liderazgo de Pablo Casado se tambalea’, ‘Alarma de ultraderecha’. Todos tratan de poner de relieve que el órdago lanzado por Fernández Mañueco —con más o menos justificación— le ha salido peor de lo que esperaba. Sin embargo la realidad es que muchos de los que piensan así obvian deliberadamente que Pedro Sánchez en sus últimas elecciones —con las mismas intenciones que Mañueco de alcanzar la mayoría absoluta y gobernar sin lastres— no ganó dos diputados como el PP de Castilla y León, sino que perdió tres. Obvian que sus pactos de Gobierno han sido con quienes con sus ideales progresistas alientan el voto proteccionista nacionalista español. No cuentan que el presidente nacional se ha visto obligado a comulgar con las ruedas de molino de independentistas y nacionalistas. Y que el liderazgo de Sánchez lleva cuestionado varias legislaturas. En política no conviene ser cínico. Lo mejor es que cada palo aguante su vela y trate de gestionar de la mejor manera posible las amargas victorias, las claras derrotas o los oportunismos. No hay otra cosa».

¿Considera que las fuerzas policiales hacen bien las

cosas para combatir el fenómeno del botellón?

SÍ 13%

NO 87%

Apoyaría un pacto PP-Vox en Castilla

y León para conseguir un gobierno estable

en la Comunidad?