Adif apela a la policía y a los vecinos para acabar con el saqueo de La Placa

Frenar el saqueo de los antiguos talleres de Renfe en La Placa dependerá de la acción policial y de la colaboración ciudadana, según reconoció ayer un portavoz del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que no dispone de recursos para poner un vigilanete en las ruinas de sus instalaciones en Ponferrada.

Los robos de cobre y raíles se están disparando en toda España, advirtió el Adif, propietario del puente giratorio y del edificio semicircular de La Placa que hasta hace 30 años albergaba los hangares donde se reparaba la maquinaria de Renfe. El Adif apeló a la colaboración ciudadana de los vecinos de La Placa para que alerten a la Policía sobre los robos de hierro. «Nos están robando en Ponferrada, en Soria, en Burgos, en Ávila, es tremendo», afirmó el portavoz de la administración. «La gente no se corta y en algunos casos, esconden las radiales cerca. Ya ni se las traen ni se las llevan», se lamentó. El Adif, sin embargo, valoró el esfuerzo que está realizando la Policía Nacional y la Guardia Civil en todo el terriorio para atajar los hurtos y robos, que se han disparado debido a la crisis.

La Subdelegación del Gobierno en León, por su parte, confirmó que no hay constancia de ninguna denuncia formal de los robos de raíles en La Placa. La Policía Municipal si están al tanto del problema y desde el Ayuntamiento de Ponferrada, la Concejalía de Seguridad anunció ayer que adoptará medidas para evitar el expolio de los talleres, aunque por prudencia, evitó concretarlas.

Los ladrones de hierro ya se han llevado parte de los raíles del puente giratorio que, impulsado por un motor, destribuía las viejas locomotoras de vapor en cada uno de los doce hangares de La Placa.

El complejo ferroviario, que incluye un haz de vías de clasificación de trenes de mercancías, una reserva de máquinas, un taller de tracción y material móvil, una playa de clasificación para el carbón, una subestación eléctrica y edificios complementarios se terminó de construir en 1954 y llegó a emplear a seiscientos trabajadores. Abandonado en la década de los ochenta, el PSOE local ya propuso en el año 2002 incluirlo en una declaración de conjunto histórico para el patrimonio industrial de Ponferrada y restaurarlo con fondos europeos. También en el año 2003, el Ayuntamiento eligió la zona del intercambiador como lugar más adecuado para la estación del futuro AVE. La instalación, sin embargo, ha continuado deteriorándose hasta que la crisis económica lo ha convertido en objeto de codicia para los chatarreros furtivos. «Si lo roban es porque alguien lo compra, sí», reconoció el portavoz Adif