La Junta se une al plan de recuperación de viñedos y revisará el registro vitícola

Desde que empezó el trabajo del Banco de Tierras del Consejo Comarcal del Bierzo, en el Bierzo se han salvado del abandono 165 hectáreas de viñedos, unas 800 parcelas de particulares que llevaban camino de perderse para siempre. Esto viene a suponer el 44% de todas las fincas cedidas por sus dueños al Banco de Tierras para que las usen otros emprendedores sin perder los derechos de propiedad.

Con estos datos positivos, desde el Consejo Comarcal, su presidente Gerardo Álvarez Courel; la responsable del Banco de Tierras, Beatriz Anievas, y la presidenta de los vinos de la Denominación de Origen Bierzo, Misericordia Bello, daban ayer a conocer que se emprenderá una nueva campaña de captación de fincas abandonas que finalizará en marzo del próximo año.

Como novedad, este año participará y colaborará la Junta de Castilla y León a través de los servicios agrarios del Bierzo y la provincia. En este sentido, la Administración autonómica ha comprometido su actuación para actualizar y poner al día el Registro Vitícola. Se da la circunstancia que la Junta tiene en la provincia de León 5.000 hectáreas de viñedos más registradas de las existentes en los propios consejos reguladores, según el dato que ayer ofrecía Misericordia Bello. El Bierzo tiene en producción cerca de las 4.000 hectáreas. Son viñedos que siguen en el registro y sin embargo no están activos, precisamente por casos de abandono de sus dueños, que ahora tienen en el Banco de Tierras del Consejo Comarcal un instrumento con garantías legales de cesión sin perder la propiedad, con múltiples posibilidades de cesión administrativa.

En la campaña promocional del Banco de Tierras se ha confeccionado un video en el que salen las jugadoras del club de baloncesto de Bembibre. Se trata de concienciar a los propietarios no sólo de viñedos, sino de plantaciones de frutales y también hortícola de la posibilidad de ceder sus fincas en manos de profesionales. Los técnicos del Consejo Comarcal, la Asociación Berciana de Agricultores y el propio Banco de Tierras son los encargados de hacer el seguimiento para que todo salga bien.