«Hay ataúdes importados de China de tan sólo 10 milímetros de grueso»

La ley indica que el ataúd de un fallecido debe contar al menos con 24 milímetros de grueso y el material de tabla de madera. Pues bien, según denuncia el consejero de Funbierzo se están importando ataúdes de China prácticamente de juguete, de papel. «Son de diez milímetros de grueso y con una pintura que imita a madera, pero que no lo son; yo llevo muchos años en este sector y los distingo nada más verlos, pero hay quien no, y son engañados», deja bien claro Eugenio Ugidos.

Vendidos en el Bierzo. En la comarca se han enterrado a personas en ataúdes chinos. Desde hace dos años se comercializa esta importación y su venta ha llegado a causar estragos en fábricas de féretros como las existentes en Ribadavia (Orense) y en Xátiva (Valencia). Ahora sólo queda una en activo, de las numerosas que había en activo.

«Los chinos venden un ataúd por 150 euros al funerario, cuando en realidad, cumpliendo la ley, un funerario tiene que pagar unos 500 euros; la solución es que les graven con impuestos y también valorar la calidad», dice Ugidos. Asegura que tiene constancia de que en un entierro en Orense el peso del fallecido hizo resquebrajar el ataúd, importado de China.