Horacio García Pacios
14 de enero de 2009, 18:47
La humildad es la verdad
lo dijo santa Teresa.
Con Humildad, no aceptamos
lo que nos dicen los amos
que a las cuentas interesa.
Es don Paco quien la cesa,
alcalde de la ciudad,
incumpliendo su promesa
de "no privatizaciones"
pues le urgen los millones,
no los votos de la mesa,
y callar la dimisión.
Privatizarán el agua,
si a don Paco no le pesa
incumplir cierta promesa
que por su engaño se fragua.
El buen Paco bien progresa
en sus confabulaciones,
y la verdad deja tiesa
después de las elecciones.
Por tan sincera persona,
doña Humildad no "dimite",
la "destituyen"..., razona:
"la verdad por los bemoles,
y el escribano que escriba".
Salustiano de Castro García
León, capital