El escritor Enrique Vila-Matas reflexiona con humor sobre su «angustia de hablar en público»

El escritor barcelonés Enrique Vila-Matas reflexionó ayer sobre su «angustia de hablar en público» en el transcurso de una charla que pronunció en Palma, en la que intercaló anécdotas propias y de otros autores con un texto de El viento ligero en Parma , una de sus últimas publicaciones. Vila-Matas recordó que su primera experiencia como orador había sido en un cine-fórum de los años 60, cuando él contaba con 16, en una sesión en la que había visto El Proceso , de Orson Welles. El escritor explicó que, después de que casi todos los asistentes al debate hubieran empezado sus intervenciones pronunciado las palabras «pienso que...», él hizo lo mismo para a continuación, intimidado y enrojecido, añadir: «Pienso que debería terminar ya este coloquio». Relató, asimismo, cómo en Milán, había seguido el consejo de otra escritora y se había tomado, como ella, un ansiolítico. Expuso que el estado de relajo con el que intervinieron los dos fue atribuido por un asistente «a la tranquilidad que debían sentir los escritores españoles tras la reciente muerte de Franco».