Diario de León

Manilla, historiador y poeta

El autor leonés publica ‘La última luz de Roma’, con el patrocinio de la Diputación a través del Instituto Leonés de Cultura para realizar una tirada numerada y firmada

Antonio Manilla muestra su versatilidad literaria con ‘La última luz de Roma’, además de triunfar como novelista en este 2020.

Antonio Manilla muestra su versatilidad literaria con ‘La última luz de Roma’, además de triunfar como novelista en este 2020.

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Si había dilema de amor: o poesía o historia, Antonio Manilla (León, 1967) tiró por la calle de lo que le une a ambas: «Son mis dos pasiones», dice. Y si a eso se le añade Roma, es cuando aparece La última luz de Roma , un cuadernillo editado en Brooklyn, Nueva York, por Hilario Barrera y su editorial Cuadernos de Humo, y que hace el número 29 y en el que, el también columnista de Diario de León, escritor y historiador, despliega ese dominio literario que acostumbra: puntería y versatilidad tanto lírica como narrativa, poseedor de una escritura digamos que natural, solo al alcance de muy pocos. La Diputación de León, como colaboración puntual con el sello, lo edita de manera física aunque es una publicación gratuita.

«Puede que sea una mezcla de prosa histórica y poesía histórica. Escribía un poema a la vez que indagaba en lo histórico», cuenta, y así transcurre este libro de pocas páginas y mucho talento. Y además tiene la posibilidad de ser descargado en la revista Epicuro, en donde Antonio Manilla y Aurelio Loureiro hacen un tandem al máximo nivel cultural.

Y Manilla, aunque lo haga en tono de duda, es el que mejor lo define: « La última luz de Roma es un cuadernillo que se abre con tres poemas en prosa y después combina prosa histórica con poemas sobre los últimos cinco emperadores con los que se apagó la luz de aquel imperio», señala. De esta manera, el escritor, poeta de grandes reconocimientos en donde con lenguaje propio consigue ser otro, también añade que este La última luz de Roma también sería «una plaquette que para mí es un capricho donde me permito unir dos de mis pasiones, historia y poesía, sin que se sepa muy bien quién glosa a quién», asegura.

También destaca Manilla ese carácter transnacional que tiene este libro, porque el contacto entre él mismo y el editor surge del conocimiento a través de las redes sociales. Y así aparece la conexión de un autor leonés publicando con una editorial en Estados Unidos y que como viaje de vuelta encuentra el interés de la Diputación, como publicación destinada a entregarse de manera gratuita y firmada por el escritor en eventos que quedarán aplazados como la Feria del Libro y otros acontecimientos. «Sí, inicialmente es un cuadernillo no venal o gratuito que se difunde en redes. En este caso, ha contado con el patrocinio de la Diputación de León a través del Instituto Leonés de Cultura para realizar esa pequeña tirada numerada y firmada en papel que también se distribuirá gratuitamente», explica. Por lo que sin duda habrá ocasión, seguro, de volver los ojos a la literatura, al margen de este mundo monotemizado por la tragedia del coronavirus.

La conexión romana, no obstante, aunque fue becado en aquella ciudad hace dos décadas no aparece como contacto sentimental: «No, porque este libro se desarrolla entre la poesía y la historia, y no tiene nada que ver con eso que por otra parte existe de que Roma se queda dentro y que es un lugar al que siempre se quiere volver», dice Manilla.

Y tiene ese comienzo el libro que marca la potencia de una siempre agradecida lectura: «No fue necesario esperar la avenida de los bárbaros, porque los bárbaros estaban entre nosotros, esperando la ocasión de desvelarse».

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