Verbis y la anunciación del ser

Cada paso de Daniel Verbis es una evolución. Pero a través de la constante de someter la mirada a contraposiciones y complejidades. Su arte reconocible conserva así el factor sorpresa, que obliga a la indagación. Y de todo eso se nutre Unción y anunciación del ser , la exposición que se puede ver hasta el 20 de mayo en la galería Trinta Arte Contemporáneo de Santiago de Compostela.

¿Cómo reflejar la fluidez del pensamiento de la vida? ¿Cómo dar vida al pensamiento fluido? ¿Cómo lograr la unificación y la convivencia de esos términos, de esas formas y esos conceptos que se nos revelan tan distanciados? La obra de Verbis persevera en el empeño de hallar una solución lógica que justifique la relación de los elementos interferidos, la superposición física de las imágenes; persevera en la necesidad de materializar esas dos almas, esas dos miradas diferenciadas. Así lo explica Carlos Borromeo, el experto que analiza esta exposición para ponerla en contexto.

«La suya es una pintura versátil porque intenta materializar las heterocronías de una mirada que no se conforma con las fotos fijas que le vienen asignadas por el contexto temporal», afirma.

Pero Borromeo lo explica de manera inicial y sirve de planteamiento ante lo que se va a ver: «El artista plástico puede incentivar un tipo de mirada deductiva o un tipo de mirada instructiva. Según sea esta, su concepción del arte puede vincularse con propuestas más o menos imprecisas o más o menos detalladas. Pero también, cómo no,su obra puede abrirse paso en el quicio de esas dos formas de abordar el objeto de la mirada, y entonces esta mirada será transpirable, dual, doblemente simultánea. Una dualidad o ductilidad de la mirada que no deja de ser un ejercicio de solapamientos y desenfoques que tiene cierto peligro, pues se corre el riesgo de perder el punto de vista, errar en la perspectiva o no delimitar correctamente la profundidad del campo de visión».

presencia en león

Daniel Verbis (León, 1968) expuso en León en Ármaga con Cartografía de una desaparición . Eso fue en noviembre del año pasado, pero su actividad se confirma como constante con esta nueva serie de obras en las que acrecenta tanto su vena artística personal como su prestigio.

«Yo soy un artista que cambia, que fluctúa. Mi proceso creativo está en continua mutación. Y en esa mutación hay la desaparición de lo anterior. Si mi obra es una espejo de mi mismo, lo que muestra no es una imagen mía, sino parte de lo que ya ha desaparecido», decía entonces al hilo de la explicación de su obra en el transcurso del tiempo.