Una Copa para espantar las dudas

Una Copa es siempre una Copa. Y más si se juega en casa y ante tu afición. Ese argumento es el que tratará de explotar el Abanca Ademar esta tarde-noche en el Palacio de Deportes para reivindicarse en una temporada que no está siendo la esperada en el plano positivo y que después de unos días de zozobra parece haber espantado el plantel leonés con sus triunfos en Liga y Copa del Rey frente al Anaitasuna.

Hoy llega otra reválida, en este caso en la Copa Asobal en la que los leoneses aparecen como los anfitriones. No es la primera vez pero sí una oportunidad única para empezar a mirar lo que resta de temporada de otra manera. A las 20.30 horas en el Palacio, un feudo que ha vivido y disfrutado de tantas jornadas de gloria, el Abanca Ademar saltará a la pista para medirse al Granollers. Será el todo o nada. O lo que es lo mismo, el que gane tendrá la opción de medirse en la final al todopoderoso FC Barcelona (salvo que una sorpresa mayúscula poco dada a producirse cuando hablamos del club blaugrana y de la competición española). Y el que pierda tendrá que mirarlo como más cerca desde la grada.

Abanca Ademar y Granollers ya se han visto las caras en la Liga en el presente ejercicio. Y ahí los de Manolo Cadenas firmaron uno de sus partidos más completos con triunfo incluido que tratarán de repetir en el mismo escenario. Eso sí, este pulso llega en un momento diferente y con otros condicionantes marcando el paso de cada uno de los protagonistas.

En el caso de los leoneses tras dos triunfos seguidos pero aún con ciertas dudas en su juego. Y además con un plantel que entre las bajas y los jugadores tocados a nivel físico no parece llegar en las condiciones más óptimas posibles. Con Boskos de baja y las dudas de Milos y Santista (este la más complicada), sólo la vuelta de Zanas Virbauskas hace esbozar cierto aire de alivio.

Con este panorama, al técnico ademarista le queda intentar buscar soluciones tácticas, ya empleadas el miércoles ante el Anaitasuna, como colocar en el centro de la defensa a David Fernández y apostar por lo que pueda aportar Zanas Virbauskas que volvía en Pamplona con tan solo un entrenamiento y después de dos meses sin jugar.

Por su parte, el Granollers, que llega a León mirando de reojo a su compromiso del martes en competición continental, tratará de resarcirse del tropiezo liguero en León con una actuación que lo lleve a la ansiada final. Y además hacerle olvidar su último fiasco en otra de las copas del presente ejercicio, la del Rey, en al que a diferencia del Abanca Ademar, caía eliminado con el Logroño.

Casi sin digerir ese partido, el Granollers es consciente de la dificultad que entraña superar a un rival que, antes del parón, logró renacer y reengancharse a las posiciones europeas, a pesar de su permanente irregularidad.

SIN MIRAR A LA LIGA

Si miramos al desempeño liguero de los dos equipos en la presente temporada tal vez el Granollers, segundo, sea el que mejor lo pueda tener. Pero un torneo del k.o. tan corto como a veces inesperado en cuanto a los resultados, puede deparar todo lo contrario a lo que las previsiones puedan apuntar. Y ahí espera asirse el plantel leonés que además contará con el apoyo de las gradas a las que esperará dar una alegría en forma de triunfo. Luego ya será otro cantar si se llega a la final y el rival es el Barcelona.

Eso sí, antes toca un adversario al que los leoneses respetan pero no tienen miedo. El aliciente de poder repetir triunfo ante ellos alimenta las opciones de un Abanca Ademar que tendrá que aplicarse a fondo y sin mostrar fisuras para salir airoso.