Europa como revulsivo

Dejar atrás la racha negativa al tiempo que se meten en el bolsillo medio pase a la siguiente ronda de la Liga Europea. Esos son los dos principales objetivos que se ha marcado el Abanca Ademar para su partido de hoy frente al Medvedi (20.45 horas, en La 8 León ). Segundos en la tabla clasificatoria, los de Manolo Cadenas quieren acabar la jornada con nueve puntos y sin perder la estela del Wisla, que marcha líder del grupo y hoy no tendrá problemas para deshacerse del Fivers.

En el ambiente planean aún las dos derrotas ligueras frente a Bidasoa y Benidorm. Dos tropiezos que han alejado a los ademaristas del segundo puesto en Liga. Pero no hay tiempo para mirar atrás en una nueva semana exigente donde al margen de recibir al conjunto ruso deberán viajar a Huesca para recuperar el último partido aplazado que les resta de la primera vuelta. Un duelo donde además está en juego la última plaza para la Copa Asobal. Quien venza se hará con ella. Manolo Cadenas señala que «un equipo como Ademar es ganador y debe estar acostumbrado siempre a convivir con la victoria, pero estamos siendo irregulares, quizá porque la mayoría de los nuevos jugadores venían de equipos donde vivían más derrotas que victorias y eso lleva un proceso de trabajo que no cambia de la noche a la mañana», dijo. El veterano entrenador leonés cree que su plantilla ha de «acostumbrarse a la constancia y, aunque parecía que se había conseguido, hay muchos altibajos y el equipo no se ha enganchado a los hábitos competitivos». Sin embargo, en este proceso está encontrando, según ha destacado, «muy buena disposición y actitud» en su plantilla, plagada de juventud y, en algunos casos, inexperiencia «a pesar de las dificultades que entraña la situación actual para adquirir esa dinámica».

En cuanto a su rival de esta tarde, el campeón ruso llega después de apabullar este pasado sábado al HC Metalurg bielorruso (40-27), venció en la pista del Aon Fivers austríaco (30-32) y cayó en su cancha ante el equipo, a priori, candidato a liderar el grupo, el Orlen Wisla Plock polaco (27-28). Si la visita del HC Metalurg supuso la transformación de la dinámica de los ademaristas en noviembre pasado, gracias a un partido redondo en defensa y ataque, el duelo ante el conjunto ruso también puede insuflar una dosis de confianza de cara a la visita liguera del jueves a Huesca o crear aún más dudas en el equipo leonés.

El partido volverá a ser a puerta cerrada por la normativa de la Junta contra la pandemia.