Recta final para una temporada de caza menor con un bagaje en positivo

La temporada de caza en León afronta su recta final . Y lo hace en este caso con un bagaje más que destacado, en clave positiva para, en el caso de la caza menor, la perdiz, el conejo y la liebre. Cifras que se acercan a las previsiones de inicios de curso allá por el mes de octubre.

En caso de la perdiz la situación se está presentado con tintes incluso mejores que los del año pasado. Eso sí, con una perspectiva más favorable para cazadores expertos. Bandos de están viendo en muchas zonas de León aunque circunstancias como la bravura de las aves y también condicionantes como el viento posibilitan que cobrarse una pieza sea tarea exigente. Por lo demás, se puede decir que la perdiz, al menos en los dos primeros meses de la temporada de caza menor, se está comportando de manera notable. En cuanto al conejo y a pesar de que en algunas zonas su presencia necesite aún de un cierto espaldarazo, las potenciales enfermedades que han mermado algo su población no han sido tan dañinas pudiéndose ver en muchas zonas un número alto de ejemplares y en otras reapareciendo.

Por otro lado, la liebre también está respondiendo a las perspectivas de inicio de la temporada con cifras más que aceptables teniendo en cuenta también la diversidad de la provincia leonesa.

Con todo, tanto para la perdiz como para el conejo y la liebre, las perspectivas y pronósticos se han ido cumpliendo de forma más que destacada y con ello están dejando tras de sí una temporada en clave bastante positiva.

Todo para una temporada que está llegando a su fin en el caso de la caza menor y que los cazadores esperan aprovechar al máximo.