La temporada de caza menor, en la recta final y en clave positiva

La temporada de caza menor que levantaba el telón a finales de octubre va camino de completar un camino más que positivo. Se esperaba que tanto con la perdiz como el conejo y la liebre la cifra de piezas cobradas fuera destacada. Y al menos y en líneas generales, este hecho se está cumpliendo.

La situación se ha presentado como se esperaba en las previsiones. Buenas jornadas en algunos casos acompañadas con ciertas dosis de mayor exigencia para los cazadores en su propósito de cobrarse alguna pieza han sido la nota dominante en la provincia leonesa.

En el caso del conejo con números más que aceptables. Eso sí, teniendo en cuenta que a pesar de que las cifras pueden considerarse similares a la de los últimos ejercicios, hay que apuntar a que su presencia no es del todo homogénea a lo largo y ancho de la geografía leonesa. Número hay, pero no igual en todos los escenarios.

Lo mismo ocurre con la perdiz que está suponiendo una nota también positiva para los aficionados. Se esperaban cifras acordes a los últimos años y así está sucediendo.

En el caso de otra de las piezas estrellas, la liebre, su número aunque menor que el conejo, también cuenta con buenas perspectivas. O así lo muestran estas casi dos primeras semanas de temporada de caza menor en las que el tiempo ha acompañado. Aunque con algunos días un poco complicados, pero en escasa medida.

A falta de unas pocas semanas para la conclusión los cazadores leoneses pueden estar más que satisfechos por el desarrollo de este campaña. Y aún con la oportunidad de que en lo que queda la situación torne a mejor.