Las pensiones no contributivas subirán el doble que las ordinarias, un 1,8%

El nuevo proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2021 incorpora un recorte en la deducción en el IRPF a los planes de pensiones individuales hasta un máximo de aportaciones de 2.000 euros, desde los 8.000 euros actuales. En el caso de los planes de empresa se eleva la aportación máxima de 8.000 a 10.000 euros. En total, con esta medida el Gobierno prevé un ahorro de 580 millones en 2022.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, explicó que según los informes de la Autoridad Fiscal (AIReF) solo el 8% de los ciudadanos con planes de pensiones privados individuales hacían aportaciones superiores a los 4.000 euros anuales. «Estos cambios afectarán a un mínimo de contribuyentes», argumentó Montero.

Tras conocer la noticia, el sector mostró su rechazo a la medida porque según sus cálculos hay 8,5 millones de personas que se van a ver afectados.

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Por otra parte, el borrador de Presupuestos también incluye un alza del 1,8% en las pensiones no contributivas en 2021, lo que supone el doble que las ordinarias, según anunció este martes el presidente del Gobierno. Esta subida de una prestación que se concede a aquellas personas que no hayan cotizado o no lo hayan hecho los años suficientes para tener derecho a una pensión, beneficiará a 449.188 pensionistas, de los que el 58% cobran jubilación y el resto invalidez.

Pedro Sánchez confirmó que la subida del 0,9% de las pensiones ordinarias beneficiará a 9,7 millones de personas, que no perderán poder adquisitivo el próximo año porque su prestación crecerá lo mismo que lo que se prevé que avancen los precios (IPC).

La coalición de Gobierno ha acordado que el IPREM, índice al que están vinculados numerosas prestaciones públicas y que llevaba una década sin prácticamente actualizarse, tendrá una subida histórica del 5%, la mayor desde que se creó este indicador en 2004.