Diario de León

Adelante Andalucía se asoma dos años después al abismo de la ruptura

Las discrepancias son organizativas, políticas

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Adelante Andalucía, la confluencia impulsada por Podemos e IU y que agrupa además a Anticapitalistas y a dos partidos andalucistas y fue creada para competir con el PSOE, se asoma dos años después de su lanzamiento al abismo de la ruptura, con una crisis larvada en los últimos meses con unos resultados muy inciertos.

Esta crisis, con demasiadas aristas, ha explotado tras una reunión que mantuvieron el lunes los principales dirigentes de las formaciones integradas en Adelante tras participar en el acto que rindió homenaje a Blas Infante, considerado el padre de la patria andaluza, en el 84 aniversario de su asesinato al comienzo de la Guerra Civil.

Como las últimas reuniones de la confluencia, esta también fue secreta, sin medios de comunicación ni antes, ni durante ni después.

Al encuentro acudieron representantes de Anticapitalistas, el partido de Teresa Rodríguez, que abandonó Podemos a principios de año; de Podemos e IU de Andalucía, de Izquierda Andalucista y de Primavera Andaluza, estos dos últimos alineados con las tesis de Teresa Rodríguez.

Las discrepancias son organizativas, políticas y de estrategias sobre las futuras alianzas, en especial un eventual pacto con el PSOE-A, que Rodríguez y los andalucistas rechazan tajantemente.

Podemos Andalucía e IU no lo descartan si fuera necesario para desbancar a la derecha del Ejecutivo andaluz, ahora de coalición con el PP y Ciudadanos, tal como ha hecho Unidas Podemos entrando en el Gobierno de Pedro Sánchez.

El disenso político de la confluencia se centra esencialmente en el objetivo de los anticapitalistas y andalucistas de convertir Adelante en un sujeto político propio, independiente, con el objetivo de presentarse a elecciones locales, autonómicas, generales y europeas.

Este objetivo choca frontalmente con el concepto que las actuales direcciones de IU y Podemos Andalucía tienen de la confluencia, a la que conciben, en sintonía con sus direcciones estatales, como una Unidas Podemos del sur.

Con estas distancias y el temor de IU y Podemos a que el partido de Teresa Rodríguez se haga con el control político de Adelante, sus miembros protagonizaron ayer una guerra de comunicados y acusaciones para conformar un relato en el que nadie aparezca como el responsable de una ruptura, que para unos es y para otros no, mientras todos apelan al diálogo.

También resta por conocer cuál va a ser la situación del grupo de Adelante en el Parlamento andaluz (11 diputados anticapitalistas y 6 de IU) si se produce una ruptura definitiva.

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