El ingreso mínimo vital se aprobará el viernes y se cobrará en junio

El Gobierno tiene previsto aprobar el viernes el ingreso mínimo vital que supondrá un avance «muy importante» en la lucha contra la pobreza y la desigualdad, según ha señalado la ministra de Hacienda y portavoz, María Jesús Montero.

En la rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros de ayer, Montero ha emplazado al viernes a que los encargados de esta medida la detallen y explique también cómo se ha coordinado con las comunidades autónomas.

Montero ha señalado que es un «nuevo derecho que va a marcar un antes y un después en la lucha contra la desigualdad» y supone cumplir con uno de los puntos del acuerdo programático del Gobierno y que, ante esta pandemia, se ha anticipado.

UN DERECHO DE TODOS

«Es un avance muy importante en los derechos de los ciudadanos, sobre todo de los niños», señaló la titular de Hacienda que dijo que luchar contra la pobreza infantil es una «auténtica obsesión» del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Esta renta mínima, que oscilará entre los 461 y los 1.100 euros mensuales y que llegará a 850.000 familias, comenzará a abonarse de oficio en junio en unos 100.000 hogares y correrá a cargo de la Seguridad Social, con un coste de 3.000 millones de euros anuales.

Podrán beneficiarse hasta 2,3 millones de personas en esos hogares, la mitad de ellos con niños y cuyos ingresos por unidad de consumo sea inferior a los 230 euros al mes.

TODOS LOS MESES

El ingreso, que se cobrará mensualmente, será el mínimo común en todo el país, ya que podrá ser mejorado con otras rentas autonómicas y dependerán de la composición del hogar, con especial atención a aquellos con niños y monoparentales.

Se otorgará teniendo en cuenta la renta familiar, calculada en función del patrimonio neto, menos la deuda y excluida la vivienda habitual, aunque sí tendrá en cuenta valor del piso y de si tiene deudas o no.

Será compatible durante un tiempo con un salario para que no desincentive la búsqueda de empleo