Diario de León

Acebes asegura que los detenidos siguieron «a pies juntillas» las órdenes de la banda de denunciar torturas

Interior denuncia a los directivos de «Egunkaria» por colaborar con ETA

La subsecretaria del Ministerio del Interior, María Dolores Cospedal, presentó ayer ante el Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audien

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M.S.P. - MADRID.
León

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Junto a Otamendi, aparecen como querellados Iñaki Uría, consejero delegado del periódico; Xabier Alegría, ex responsable de KAS y supuesto enlace entre el diario y ETA, y Xabier Oleaga, antiguo director de ''Egunkaria''. Acebes acusó a todos ellos de «un delito de colaboración con banda armada, más allá del ánimo de injuriar o calumniar» a las fuerzas de Seguridad, para participar así en los «fines y objetivos» de la organización terrorista. El eje de la denuncia del Ministerio del Interior para imputar a los directivos un delito de cooperación con ETA es un breve manual de tres páginas incautado al «comando Araba» el 19 de marzo de 1998, en el que la organización da instrucciones a todos sus activistas de «denunciar a cuantos más txakurras (''perros'', policías en el argot etarra) podáis» en cuanto se produzca una detención «por corta e insignificante que sea» y «aunque sea de tráfico». En este manual, que se ha aportado como documentación en la querella, ETA desvela que las denuncias falsas tienen como objetivo «crear tensiones entre los partidos democráticos, conseguir que éstos se pronuncien y desgastar al enemigo militar mediante todo el machaque judicial que se pueda». La organización terrorista, en este documento, invita a sus integrantes a utilizar la «imaginación» para inventarse malos tratos, si bien recomienda «hablar de interrogatorios, golpes, bolsa, bañera, potro y tortura psicológica» con el fin de que se hagan eco de estas denuncias el mayor número de medios, organizaciones internacionales «y con suerte algún partido oportunista y dubitativo». Para el ministro Acebes, los cuatro directivos del rotativo «han seguido de manera muy clara» la directrices que ETA da en este documento, que ya fue utilizado como prueba por las autoridades españolas para conseguir la extradición del activista Ramón Aldasoro desde EE.UU., quien también había denunciado torturas. «La conexión entre las declaraciones y actuaciones de los denunciados y el manual es más que evidente, limitándose aquellos a seguir punto por punto todas las instrucciones que se contemplan en las directrices de la organización terrorista», sostiene la querella de Interior, que subraya que estas falsas acusaciones no son ni mucho menos nuevas.

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