Diario de León

Los socios urgen a PSOE y Podemos a llegar a un acuerdo en el ‘sí es sí’ para no elegir

Irene Montero avisa a Sánchez sobre la reforma de la ley: «Haré lo necesario para mantener el consentimiento»

Pedro Sánchez a su llegada a la reunión de diputados y senadores, acompañado de ministros y dirigentes del partido. CHEMA MOYA

Pedro Sánchez a su llegada a la reunión de diputados y senadores, acompañado de ministros y dirigentes del partido. CHEMA MOYA

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

La batalla por la reforma de la ley del ‘solo sí es sí’ entró de lleno ayer el en el Congreso de los Diputados. Separados por las diferencias en torno a la cuestión del consentimiento en la norma, PSOE y Unidas Podemos intensificaron contactos con los partidos que conforman el llamado bloque de investidura para tratar de inclinar la balanza hacia sus postulados. Pero a los aliados de la legislatura, claves para que los socialistas no tengan que recurrir al PP para sacar adelante su proposición de modificación de la norma —que no cuenta con el plácet de los morados—, mantienen cautela ante una pugna que amenaza con causarles más quebraderos de cabeza que beneficios. Por eso piden a la dos partes de la coalición que «reduzcan el ruido» y les alientan a limar sus divergencias para no verse salpicados a menos de cuatro meses de las municipales y autonómicas del 28 de mayo.

De todos las formaciones que componen este sostén del Gobierno, Esquerra, EH Bildu y PNV son las que acaparan todos los focos por su fuerza parlamentaria. Los republicanos reconocieron ayer que no se cierran a alcanzar una cuerdo con Ferraz, pero su portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián, prefirió mantener la equidistancia dando una de cal y otra de arena. «Estamos iniciando el proceso de mejora de la ley, pero no queremos fomentar una tormenta que podría haberse evitado y que puede tener consecuencias letales», zanjó. El diputado soberanista también lanzó un guiño al partido que dirige Ione Belarra y avisó que sus votos no van «a contribuir al regreso del calvario probatorio de la legislación anterior», en referencia al debate por el consentimiento como eje central de la norma.

Precisamente esta es la cuestión que más dudas genera en EH Bildu, que considera la propuesta socialista «un paso atrás». Sobre todo después de la tormenta política levantada por las palabras pronunciadas este martes por la ministra de Justicia, Pilar Llop, con las que insinuaba que el principal cambio que introducirá su proposición es recoger la necesidad de «una herida» para demostrar «violencia o intimidación». «Si para que el consentimiento sea efectivo y los jueces crean a las víctimas estas tienen que demostrar signos de violencia, volveremos al modelo anterior», advirtió sin ambages su diputada Bel Pozueta.

Por su parte, el PNV también mostró su «sorpresa» de que el debate sobre este tema «tan importante y delicado» se esté llevando a cabo «en los medios de comunicación» y que ellos hayan conocido las propuestas del Gobierno en esta materia solo que por lo que han leído. El portavoz parlamentario de los nacionalistas vascos, Aitor Esteban, criticó que el PP ya haya mostrado su apoyo al PSOE antes de «saber exactamente» lo que propone y con el objetivo de crear «una brecha en la coalición» y obtener «rédito» político.

La ministra Irene Montero aseguró que hará cuanto esté en su mano para conservar el núcleo de la ley del ‘sí es sí. La titular de Igualdad se sometió ayer a la sesión de control en el Senado y obviamente fue objeto de las críticas de la oposición por las rebajas de condenas a más de 400 delincuentes de sexuales desde que la ley entró en vigor el pasado octubre.

«La mayoría de los jueces están aplicando bien la ley y no bajan las penas como ayer -por el lunes- vimos de un juez que decidió mantener la pena a uno de los agresores de la Manada». «Haré lo necesario para mantener el consentimiento», señaló.

tracking