FISBIO ES CIENCIA EN LEÓN
MÁS ALLÁ DEL METABOLISMO. Un equipo multidisciplinar —del Hospital de León y de Ibiomed— trabaja en la búsqueda de alternativas terapéuticas con el objetivo de mejorar la calidad de vida de pacientes con afecciones metabólicas hepáticas.
Trabajo en un laboratorio de Ibiomed. marciano pérez
El grupo de investigación Fisbio (Fisiología aplicada a la Biomedicina) —liderado por la profesora Sonia Sánchez Campos—, que cuenta con investigadores tanto clínicos como básicos del Instituto Universitario de Biomedicina (Ibiomed) de la Universidad de León (ULE) y del Complejo Asistencial Universitario de León (Caule), tiene como objetivo el estudio de la enfermedad metabólica hepática por acumulación de grasa (NAFLD/MAFLD) y su relación con la obesidad y el síndrome metabólico, centrándose en el papel de la microbiota intestinal en el desarrollo de estas enfermedades y en la búsqueda de aproximaciones terapéuticas basadas en su modulación.
Este grupo de investigación en colaboración con el Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Hepáticas y Digestivas (CIBERehd) del Instituto de Salud Carlos III, ha llevado a cabo un estudio exhaustivo sobre el papel de la microbiota intestinal en el desarrollo de enfermedades metabólicas hepáticas, como la enfermedad metabólica hepática por acúmulo de grasa.
El equipo multidisciplinario de investigadores, compuesto por científicos con una amplia experiencia en el estudio de la obesidad, el síndrome metabólico y sus manifestaciones hepáticas, ha centrado su atención en el análisis de datos metagenómicos y metabolómicos. Estos datos fueron obtenidos tanto de pacientes como de modelos experimentales in vitro e in vivo.
La investigación se enmarca en el grupo Fisbio, el cual ha acumulado una vasta experiencia en la comprensión de los mecanismos subyacentes a las enfermedades metabólicas hepáticas y ha buscado enfoques terapéuticos basados en la modulación de la microbiota intestinal.
El análisis de los datos metagenómicos y metabolómicos aportan diferencias significativas en la composición de la microbiota intestinal entre pacientes con enfermedades metabólicas hepáticas y sujetos sanos, unas diferencias que podrían ser utilizadas como biomarcadores para la detección temprana y el diagnóstico de estas enfermedades.
«La microbiota intestinal desempeña un papel fundamental en la salud y el equilibrio metabólico del organismo. Nuestro objetivo es comprender cómo la composición de la microbiota se relaciona con el desarrollo de enfermedades metabólicas hepáticas y utilizar esta información para desarrollar enfoques terapéuticos innovadores», detallan las investigadoras Esther Nistal, María Juárez y Sara Selva de Román, del Ibioimed en un audiovisual divulgativo sobre el trabajo desarrollado desde este grupo científico.
El grupo Fisbio se centra principalmente en este campo, en la búsqueda de soluciones científico-técnicas sobre la composición y funcionalidad de la microbiota intestinal asociada a enfermedades metabólicas. En los últimos años, se ha demostrado en numerosos estudios que la microbiota intestinal emplea una función muy importante en la salud de los seres humanos, y en este sentido, los integrantes de este grupo de investigación plantean nuevas alternativas terapéuticas basadas en su modulación, mediante el uso de probióticos, prebióticos, simbióticos y el trasplante de microbiota intestinal.
Las enfermedades metabólicas como la obesidad y la enfermedad de hígado graso no alcohólico poseen una incidencia con tendencia creciente. Este hecho, ligado a la ausencia de un tratamiento eficaz para hacerlas frente, derivan en una elevada carga económica y social a nivel mundial. «Son numerosos los factores que influyen sobre la microbiota intestinal y su equilibrio, siendo esencial conocer no sólo su composición, sino también su implicación en la homeostasis fisiológica», explican las investigadoras. «Es clave comprender los efectos de los diferentes productos sobre la microbiota intestinal».