Fernando Iturribarría - PARÍS.
21 de enero de 2003, 1:00
Un tribunal de Versalles con jurado popular juzga desde ayer a la enfermera francesa Christine Malèvre acusada de asesinar a siete enfermos terminales en un hospital de los alrededores de París. El juicio relanza en Francia el debate sobre la eutanasia, que el actual Gobierno de centro-derecha descarta autorizar por ley. La procesada, considerada una asesina en serie por los familiares de las víctimas, puede ser condenada a cadena perpetua.
Malévre, de 33 años, está acusada de haber asesinado a siete pacientes, entre febrero de 1997 y mayo de 1998, ingresados en el servicio de neurología y neumología del hospital de Mantes la Jolie. Se trataba de enfermos de cáncer de pulmón o laringe en fase terminal que sucumbieron de manera prematura por sobredosis de morfina o potasio.
Un especialista en matemáticas estadísticas concluyó que el porcentaje de muertes era de 2,5 a 4 veces superior cuando la acusada trabajaba.