Diario de León

La 'nueva normalidad' en León

El 20% de los bares no ha abierto y el 30% de los comercios prevé que cerrará este año

Un mes después del estado de alarma dos de los sectores básicos de León exhiben los efectos de la crisis económica

León

Creado:

Actualizado:

Un mes después del levantamiento del estado de alarma, la realidad de la hostelería y el comercio de León tiene poco de normal.

Pese a encuadrarse en un época anual favorable en otras ocasiones, la radiografía que definen los responsables de cada sector revela que los efectos de la pandemia lejos de remitir dejarán factura : un 20% de los bares, restaurantes y establecimientos de ocio nocturno no ha abierto, ni se prevé que lo haga en los próximos meses; y, aunque el 99% de los comerciantes han apostado por levantar la trapa, se prevé que el 30% tenga que volver a bajarla de manera permanente antes de que finalice el presente año.

Heridas

La hostelería anota pérdidas de un 50% y en el comercio, el 30% del empleo sigue en Erte

La herida se siente con especial incidencia en el sector hostelero, como reconoce el presidente de la asociación provincial. Martín Méndez reseña que, un mes más tarde de que se cerrara el estado de alarma, «ha abierto en 80 % de los establecimientos» de los 4.000 censados en la provincia, 1.200 de ellos en la capital.

La cifra determina que «el 20 % restante», 800 en todo León y 240 en la ciudad, no lo ha hecho, pero sobre todo que «la gran mayoría no va a volver a abrir nunca». «Se quedan por el camino, aunque siempre hay alguien que en algunos casos podrá coger el traspaso del bar», concede el portavoz del sector, quien admite que incluso en estos casos «costará más que antes, sobre todo en los barrios y en los pueblos».

Junto con los que han aprovechado para adelantar la jubilación, como el Infierno o el Begoña, dos históricos del Barrio Húmedo, la decisión de no volver a prestar servicio afecta a los que «ya arrastraban problemas y deudas de atrás», reseña Méndez.

Con más de dos meses de cierre impuesto por la pandemia, en los que «han acumulado más deudas porque han tenido que seguir pagando el alquiler, la luz y todo los demás», los propietarios han sido conscientes de que «alargar esa muerte no le interesa a nadie», admite el presidente de la asociación de hostelería y turismo.

De esta resta «no se libra ningún sitio, ni siquiera el Barrio Húmedo», avisa el portavoz del colectivo. Por delante, el horizonte se presenta peor aún. En comparación con el año pasado, los hosteleros se encuentran ahora con cajas en las que se contabilizan «entre un 50 y un 60% menos de ingresos», traslada Méndez.

«Lo peor es que viene el mes de agosto, que para nosotros era el mejor mes del año, y la caída va a ser mucho mayor. Sin aglomeraciones de gente que viene de fuera y sin casi extranjeros no vamos a poder coger ese colchón que teníamos otras veces para afrontar después el invierno», explica, tras incidir en que «en los barrios la ampliación de las terrazas hacen que estén un poco más contentos» los profesionales, pero «en el casco histórico la bajada se acusa todavía más».

El colchón se antoja más necesario aún en previsión de la bajada de consumo que se anuncia con la bajada de temperaturas. Los responsables del sector no tienen dudas: «el invierno traerá más cierres de los que ha habido». «Cuando se cierren las terrazas, se ponga frío y anochece a las seis de la tarde se avecinan curvas», reconoce Méndez, quien se resigna a que «la única solución pasa por que salga la vacuna y la gente pierda el miedo».

El miedo lo identifican los hosteleros como el causante de la bajada del consumo. Aunque se ve movimiento en las terrazas, «la gente no quiere entrar en su gran mayoría en los locales y los mayores apenas salen», como señala el presidente de la asociación.

Fuera de la franja de «entre 25 y 50 años, que es lo que se ve un poquito», es «complicado» encontrar clientela. «Los profesionales estamos animados porque tenemos que animarnos sí o sí. Somos autónomos, pero nos vamos dando cuenta de que esto va despacito.

Quien haya pedido un ICO a partir del próximo año va a empezar a tener que pagar y, si esta demanda no crece, algo que al menos no parece que vaya a suceder hasta el verano del próximo año, a ver cómo lo hacemos», deja caer Méndez.

La caída de la hostelería arrastra a su vez a los comerciantes, como reconoce el portavoz del sector dentro de la Cámara de Comercio. José Manuel Alonso expone que «las terrazas están llenas con los mismos, no se mueven, hay poco tránsito», y eso hace que «la gente no entre» en los negocios.

Aunque «están abiertos el 99%» de los comercios», las ventas «están siendo muy espaciadas y de menor importe», porque aunque las compras «sean de más cantidad en muchos casos hay menos clientes», como traslada el portavoz del colectivo, quien cita que esta situación se da a pesar de que «se está aprovechando el periodo de rebajas y el bono puesto en marcha en colaboración con el Ayuntamiento de León».

Al rebufo, el envés de las cajas diarias deja una consecuencia directa en el empleo: un 30% de los contratos vinculados al comercio, que se estima que agrupa a 15.000 trabajadores en toda la provincia, se mantiene todavía dentro de un Erte.

«Están sacrificándose los autónomos todo lo que pueden y más, aunque desciendan las ventas», apunta Alonso, quien abunda en que «no se saben cómo van a venir los meses de octubre y noviembre, que pueden ser los peores», y harán que «la cuesta de enero sea muy prolongada y se alargue». «Para igualar los datos de 2019 si llegamos en la primavera de 2021 nos daríamos por satisfechos», plantea el portavoz del sector.

El arrastre de los indicadores hace que la Cámara de Comercio e Industria de León augure que «antes de final de año se pueden cerrar un 30%» de los negocios. Aunque en parte «puede haber un relevo de algunos negocios motivado por la necesidad de generar autoempleo por parte de los que se han quedado en paro», indica Alonso.

Dentro de este escenario, «el que sea multi todo, que no ofrezca algo identificativo sobrevivirá peor», vaticina el representante del órgano cameral, quien indica que «hay comercios muy especializados que han crecido, como tiendas de deportes con nichos muy concretos».

«En todo caso, son una anécdota», subraya el portavoz del sector, quien reivindica que «es necesario el apoyo de las administraciones al comercio y a los autónomos en general». «Necesitamos más tráfico peatonal, que la gente salga a la calle. El comercio y hostelería van unidos y son imprescindibles para León», recalca.

tracking