El Ayuntamiento privatizará ahora el mantenimiento de los edificios
El consistorio firmará una factura de 5,2 millones para la conservación durante cinco años
El mandato de José Antonio Diez se inauguró con el contrato de privatización del mantenimiento de la ciudad, que firma una factura de entre 3,5 y 4,2 millones de euros anuales, en función de las obras que se ejecuten, siguió con el préstamo de bicicletas, que obliga al pago por parte de los usuarios, y ahora apunta una nueva externalización. La junta de gobierno local del Ayuntamiento de León aprobó ayer la licitación del servicio de mantenimiento, conservación, reparación y reposición en edificios e instalaciones municipales por un periodo de cuatro años, más uno adicional de prórroga por acuerdo entre las partes, que sumará una factura de 5.228.429 euros.
La nueva externalización avanza en la política que ya comenzó en los últimos mandatos, empujada por las restricciones del plan de ajuste en las que se obligaba a la tasa de reposición cero, salvo en servicios esenciales. Aunque el Ayuntamiento ya se libró desde hace más de un año de este corsé, sin reposiciones de contratos, la plantilla municipal ha dejado vacíos que ahora impiden cubrir las necesidades sin incurrir en nuevas contrataciones.
Lejos de esta opción, el equipo de gobierno, como ya mostró con la privatización del mantenimiento de infraestructuras, ahora extiende el modelo para que el «ámbito de actuación» sea «la totalidad de los inmuebles municipales: administrativos, educativos, culturales, deportivos, etcétera, y todos aquellos de titularidad municipal», según trasladaron desde el consistorio. La definición del objeto del contrato permitirá atender las necesidades para las que apenas quedan cuatro personas en activo en la plantilla: dos fontaneros, un pintor y un albañil, al margen de los 9 operarios de servicios eléctricos. A mayores, se incluirán otras intervenciones que se sacaban a contratación, como los arreglos de los patios, y que ahora serán más ágiles.