Los chabolistas que aún perviven en León exigen «una solución ya»

Después de 33 años y cansados de que «cada poco salga un nuevo anuncio que se queda en nada», los habitantes de los dos asentamientos chabolistas que perviven en León, los Altos del Duero, frente al Hospital, y las Graveras, detrás del Hispánico, reclaman «una solución ya». Ante el encuentro que mantendrá hoy la Junta con el Secretariado Gitano, que se anuncia como una «oportunidad de financiación para conseguir la erradicación» de estas infraviviendas, la veintena de familias afectadas de manera directa exigen que «se llegue a acuerdos concretos», en lugar de «más promesas que no se cumplen», como traslada Ricardo Torres, presidente de la asociación de Minorías Étnicas (Asmie).

Torres insiste en la necesidad de aprovechar el dinero que se anuncia de nuevo, pero advierte de que no se trata de la primera vez que los representantes públicos lo comprometen «sin que haya resultados». «En los últimos 10, al menos una vez cada año, lanzan una nueva promesa, pero seguimos sin nada. Mientras tanto, vemos por ejemplo cómo en Burgos acaban de aprobar una subvención de 1,6 millones de la Junta para erradicar un asentamiento. Esa es la diferencia entre los que cumplen y los que pasan del pueblo gitano», señala, tras insistir en que «el PP y el PSOE han tenido alternancia en el gobierno y no han hecho nada».

Pese a la cita de esta mañana, Torres no se fía siquiera de la mediación del Secretariado Gitano, que «ha estado mudo durante todo este tiempo». «Las administraciones no hacen nada y el intermediario no levanta la voz. Ojalá que se muevan de verdad y saquen adelante las ayudas que se necesitan para sacarles de los asentamientos», advierte, tras apuntar que las familias le han pedido que ejerza de portavoz.