Diario de León

Tribunales

Les piden 63 años de prisión por explotación sexual

Gestionaban un club nocturno y obligaban a prostituirse a seis jóvenes sudamericanas

El juicio se celebrará en la Audiencia. MARCIANO PÉREZ

El juicio se celebrará en la Audiencia. MARCIANO PÉREZ

León

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Un varón y su compañera sentimental se enfrentan a penas de 63 y 56 años de prisión, acusados de un delito de explotación de personas con fines sexuales, por el que serán juzgados el próximo día 14 de marzo en la Audiencia Provincial a las 9.30 horas.

De acuerdo al escrito de calificaciones provisionales emitido por el Ministerio Fiscal, los procesados, mayor de edad el dueño del club y sin antecedentes penales y su pareja sentimental, de nacionalidad no española, se concertaron con la hermana de ella (contra la que no se dirige la acusación por encontrarse en situación de rebeldía).

Buscaban captar mujeres de nacionalidad paraguaya, aprovechándose de su precaria situación económica y social, facilitándoles la entrada en territorio español, proporcionándoles el billete y el viático para hacerse pasar por turistas, con la finalidad de que ejercieran la prostitución en un club León, distribuyéndose distintas tareas entre los mismos, con el ánimo de obtener un beneficio económico derivado de la explotación de las mismas.

El líder de la trama encabezaba la estructura criminal al fijar las condiciones del ejercicio de la prostitución, financiando los viajes de las mujeres que venían a trabajar a su Club y realizando labores de traslado desde el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas a su club.

Condiciones
Las jóvenes trabajaban de 18.00 a 4.30 horas y tenían que pagar hasta 10 euros por usar el wifi

Efectuó también envíos de dinero Desde el 7 de julio de 2010 hasta el 25 de enero de 2019, envió un total de 19.333 euros por cantidades que oscilan entre 1.000 y 3.000 euros ,con la finalidad de financiar viajes de mujeres para trabajar en su club, de los que hay destacar tres envíos por importe total de 4.362 euros por importes respectivos de 2.075 euros, 1.279 euros y 1.009 euros) así como cinco envíos por importe total de 2.614 euros en el 2011, 2012, 2013 y 2014.

La acusada, pareja sentimental del otro investigado, realizaba funciones de control del ejercicio de la prostitución de las víctimas, presionándolas para que trabajasen y saldasen la deuda, sustituía al varón cuando no se encontraba y enviaba dinero a con la finalidad de financiar el viaje de las mujeres.

En fecha no determinada del año 2018, una de las jóvenes se puso en contacto en su país con otra muchacha, a través de una persona no identificada motivada por la precaria situación económica en la que se encontraba, quien le ofreció la posibilidad de venir a trabajar en el club, aceptándola y de este modo le facilitó el billete de avión, una reserva de hotel y 1.000 euros de viático, dándole las oportunas instrucciones para que simulara venir a España como turista y no levantase sospecha y con la obligación de abonar al dueño del club 800 euros por gastos de viaje que debía satisfacer ejerciendo la prostitución.

Las condiciones de trabajo en el club consistían en cobrar por los pases, 50 euros. Del primer pase 25 euros eran para la casa en concepto de alojamiento y manutención de lunes a jueves .Los viernes, sábados y domingos tenía que pagar 50 euros Después en el resto de pases se pagaba a la casa 5 euros en concepto de sábana. Por salir del club con clientes tenía que pagar 80 euros. La habitación era compartida con otras chicas. Tenía que pagar 10 euros por el wifi. El horario se fijaba de 18.00 a 03:00 horas todos los días, salvo sábado y domingo de 18.00 a 04.30 horas de la madrugada, descansando un día. El mismo modus operandi se repitió con otras cinco jóvenes más.

Se practicó entrada y registro autorizada judicialmente en virtud de auto de 26 de octubre del 2020, interviniéndose en la oficina 8.695 euros en dinero fraccionado, documentación donde se controlaba los servicios con los clientes, una carpeta con 13 fotocopias de pasaportes de mujeres, agendas correspondientes al año 2016, 2017 y 2019 donde se apuntaban los beneficios obtenidos, recibos de envío de dinero y en dos habitaciones tarjetas de embarque, reservas de alojamiento en hotel y reservas de vuelo.

En la vivienda del acusado, se intervinieron 18.000 euros, en su mayoría en billetes de 50 euros. El dinero localizado procedía de la actividad ilícita de explotación de las víctimas.

Por seis delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y de favorecimiento de la inmigración irregular, la Fiscalía propone una pena para el varón de diez años y medio de prisión y nueve para su novia.

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