Con un año de retraso, unirá el Alto del Portillo con la vía a Benavente y absorberá 24.000 vehículos al día
El primer tramo de la ronda sur no podrá abrirse hasta septiembre
Finalmente la primera fase de la ronda sur no podrá ser inaugurada hasta principios de septiembre, ya que aún restan por rematar algunos
El trazado de la primera fase de la ronda sur se abrirá al tráfico prácticamente un año después del plazo anunciado cuando el entonces ministro de Fomento, Rafael Arias Salgado, explicó en febrero del 2000 que el tiempo de ejecución previsto para esta vía sería de 20 meses. De acuerdo a estas estimaciones, la ronda debería haberse inaugurado en octubre del 2001. El riguroso invierno de ese año, con abundantes lluvias, impidió realizar trabajos durante alrededor de seis meses. Posteriormente, la empresa adjudicataria -Puentes y Calzadas- dijo que se abriría en enero del 2002 y luego en primavera. Cuando el 18 de junio fue inaugurada la denominada vía de penetración sur, que conecta Sáenz de Miera con la primera fase de la ronda sur, el alcalde de la ciudad anunció la apertura al tráfico de los cuatro kilómetros que unen el Alto del Portillo con la carretera de Benavente para finales de julio, aunque finalmente no ha podido ser. El concejal de Urbanismo, Cecilio Vallejo, señala que será durante los primeros días de septiembre cuando esta vía pueda ser utilizada. El ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, vendrá a inaugurar esta obra, según se ha anunciado en el Ayuntamiento. El primer tramo de la ronda sur cuenta con un trazado de cuatro kilómetros, a los que hay que añadir otro de ramales (ver gráfico). El presupuesto de esta infraestructura sobrepasa los 27 millones de euros (4.500 millones de pesetas). En esta cifra también se incluye el importe de la expropiación de las 350 fincas afectadas por el vial. También habría que añadir los 1,2 millones de euros (200 millones de pesetas) que debe destinar el Ayuntamiento para el alumbrado de las dos fases de la ronda, ya que el Ministerio de Fomento no incluye este gasto en el presupuesto para esta carretera, ni tampoco su mantenimiento posterior. Cuando se abra al tráfico, aglutinará a diario el tránsito de 24.000 vehículos y dará pleno sentido a la vía de penetración sur, disminuyendo la circulación a la mitad en la atascada avenida de Fernández Ladreda.