San Andrés y Villaquilambre se quejan del «caso omiso» que les hace la CHD

Los ayuntamientos de San Andrés del Rabanedo y Villaquilambre, donde viven 55.000 personas, se han cansado de intentar contactar con la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) para abordar los múltiples problemas que padecen sus municipios por la falta de actuaciones del organismo. La gota que ha colmado el vaso de ambos consistorios es el «desastre» que produjo el temporal del pasado diciembre por la falta de limpieza de los canales que debería haber efectuado la Confederación.

Es más, San Andrés culpabiliza a la CHD de las inundaciones que dejaron en «un estado lamentable» la senda del Carbosillo al desbordarse el Arroyo del Valle por la maleza que ya acumulaba al no haberla retirado este organismo responsable del viaducto, ni haber autorizado al Ayuntamiento a limpiarlo como pidió el equipo de Gobierno, aunque fuera a cargo de las arcas municipales. Por eso reclamarán a la CHD más de 183.000 euros, la cifra en que los técnicos municipales han valorado los daños.

El disgusto con la Confederación llegó al pleno del pasado jueves, donde los grupos excepto el PP, aprobaron incluso una moción para pedir la dimisión de la presidenta del organismo, Cristina Danés, «por la mala gestión y la manifiesta incompetencia para dirigir con eficacia» la entidad. También le exigen «diligencia» para el cuidado del Canal del Carbosillo.

En el caso de Villaquilambre, el Ayuntamiento ha decidido actuar para atajar una problemática de inundaciones que recae en gran parte sobre los hombros de la Confederación Hidrográfica. Barajan construir compuertas que permitan trasladar parte del agua de las presas de San Isidro hacia el río Torio. Estas canalizaciones se encuentran a la altura de la población de Robledo, y para habilitar las compuertas se han solicitado los permisos a los regantes y a la Confederación, que no ha respondido.

sin limpieza de los canales

Las obras serán financiadas por Villaquilambre, aunque los trabajos deberían abocar a la CHD a verse obligada a mejorar la sección útil de las presas mediante su limpieza. Una reclamación que viene reiterando el consistorio sin éxito. El Ayuntamiento ha dado ahora un paso más y ha puesto los hechos en conocimiento del Procurador del Común, a quien han informado de que «habitualmente se mandan cartas y oficios» a la Confederación «para la limpieza de presas y canales de riego, haciendo caso omiso a nuestras peticiones». También señalan que consideran «un problema el abandono y la falta de control por parte de la CHD de los sistemas de riego, que provocan inundaciones puntuales y retenciones de agua por el nulo mantenimiento de las acequias de riego».

Villaquilambre también ha remitido una carta al actual Ministerio de Transporte y Movilidad (antiguo Fomento) para pedirle que corrija el tapón que forma la ronda Este cada vez que llueve con fuerza. El soterramiento de los cuatro carriles permitió eliminar uno de los puntos negros del tráfico, pero creó un problema de inundaciones. Tras el fenómeno de diciembre se «puso de manifiesto, una vez más, el problema que provoca la retención de agua procedente de la cuenca situada al norte de la carretera estatal LE-20 a la altura de Villaobispo por la reducción dramática de la sección que evacúa las aguas de la cuenca hacia el canal paralelo, provocando que rebose hacia la nacional CN-621 y hacía la calle Real, colapsando más si cabe el sistema de saneamiento y provocando daños por entrada de agua a las viviendas desde la vía pública». El regidor entiende que esa situación «no puede mantenerse más en el tiempo», por el riesgo para el tráfico y los vecinos y solicita que se «tomen urgentemente las medidas oportunas».