El alcalde pide esclarecer el incendio de Villapadierna

El alcalde de Cubillas de Rueda, Carlos Fernández, pide que se aclare quién es el responsable del incendio de las 78 hectáreas de roble y pino de Villapadierna, —que se produjo el pasado jueves 22 de agosto— ya que desde la Junta de Castilla y León se sostiene que fue intencionado. Fernández quiere que la administración autonómica diga que investigaciones se están haciendo dado que al parecer «hay por ahí un incendiario, pues dicen que fue intencionado. Si se está haciendo un seguimiento de los móviles por la zona o qué dice la empresa que estaba allí trabajando», según el alcalde. A la vez el alcalde pide explicaciones porqué la Junta de Castilla y León ha dado autorización a una empresa para que se hagan trabajos de entresaca de pinos con maquinaria pesada como orugas metálicas en un periodo de tiempo donde está prohibido para todo el mundo. «En esta época no se puedan hacer cortas por el tema de los incendios. Si un guarda forestal ve a un vecino en el monte con una moto sierra la multa es considerable ya que está prohibido». No entiende que haya una empresa cortando pinos en pleno agosto. «Alguien tendrá que dar explicaciones porqué una empresa está trabajando en este monte en la zona más peligrosa que hay de cara a posibles incendios y en el momento más peligroso del año. Esta pregunta alguien la tendría que contestar», según Fernández.  

Por otra parte señala que lo único que conoce, es que al parecer que las primeras pesquisas indican que el Seprona han mantenido contacto con una empresa navarra que está haciendo trabajos de entresaca de picos y les manifestaron que «ellos estaban lejos de donde empezó el fuego».  

El Ayuntamiento de Cubillas de Rueda se va a interesar para ver si se han abierto diligencias para que el propio alcalde —que es abogado— pueda personarse a fin de conocer cómo van las investigaciones sobre las causas del incendio. Además Fernández recuerda que este bosque comunica con otros pinares y montes de Corcos y Almanza que en total suponen varios cientos de hectáreas que de haberse propagado el fuego del pasado jueves podría haber causado una catástrofe medio ambiental de graves consecuencias.