El «mejor acuerdo posible» para trabajadores y comarcas mineras
El Gobierno y los sindicatos UGT, CC OO y USO, junto con la patronal del carbón, firmaron ayer en Madrid el Acuerdo Marco para la Transición Justa de la Minería, que establece el plan social para los trabajadores del carbón y un escenario de inversiones que el Ejecutivo calcula en 250 millones de euros entre 2019 y 2023, aunque con medidas que se extienden hasta 2027. «El mejor acuerdo posible», según coincidieron las partes, a pesar de que se ratifica el final establecido por la UE para las minas no rentables (y para aquellas que aunque hayan logrado la rentabilidad no devuelvan las ayudas cobradas desde 2011), para el próximo 31 de diciembre. Los discursos tras la firma se centraron en valorar el compromiso firmado como una garantía de futuro tanto para los trabajadores que pueden acogerse a las prejubilaciones como a las bajas incentivadas; y también para las cuencas.
Fuera del Ministerio se concentraron los trabajadores de las subcontratas mineras, reunidos en la Plataforma Santa Bárbara, que exigen que se les apliquen las mismas condiciones del plan social de los empleados de las mineras; y rechazan las medidas de recolocación fijadas en el marco de actuación.
La ministra de Transición Ecológica (que señaló que era el momento «más emocionante» de sus cuatro meses como ministra) reconoció que queda mucho trabajo por hacer, pero se ha fijado un marco que era urgente para «no dejar a nadie atrás». Destacó la propuesta de elaborar «contratos de transición justa, con el objetivo de ayudar a las comarcas a fijar empleo del futuro con proyectos coherentes, ajustados a los contextos socioeconómicos y que desarrollen el potencial de las zonas».
En cuanto a la responsable de Trabajo, que se felicitó porque «el diálogo social funciona cuando hay interés por llegar a un entendimiento», explicó que es un acuerdo marco que tiene que ser desarrollado ahora.
Por la parte sindical el secretario general de CC OO de Industria, Agustín Martín, destacó que se «supera una época de incumplimientos por parte de los gobiernos anteriores y de abandono de los trabajadores». Desde Fica-UGT Pedro Luis Hojas señaló que el acuerdo «es el comienzo, no es el final de nada», por lo que hay que velar por el cumplimiento del acuerdo. Desde USO Pedro Ayllón recordó que su intención era incluir a las subcontratas en un acuerdo que «globalmente es insuficiente».