El museo estrena temporada con dos nuevas exposiciones

El director de Políticas Culturales de la Junta de Castilla y León, José Ramón González, presentó ayer dos nuevas exposiciones temporales en el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, ubicado en Sabero. Cien años del ferrocarril Ponferrada-Villablino y Bárbara es el título de las muestras que podrán contemplarse a partir de hoy en este centro cultural.

González recordó que el museo desarrolla a lo largo del año una intensa actividad cultural, que permite dar a conocer el pasado, el presente y el futuro de un sector, el minero, que tanto ha aportado a la economía, la sociedad y la cultura de la Comunidad. El director ha destacado que la existencia de este museo y su labor a lo largo de los últimos once años «es un ejemplo claro de la descentralización de la cultura y de que se puede hacer desde el ámbito rural cultura de calidad». Esta es una de las líneas estratégicas que marcará la acción de la Consejería de Cultura y Turismo en los próximos años: la apuesta por la cultura como elemento dinamizador y de progreso en la zona rural.  

La primera de las exposiciones presentadas hoy es Cien años del ferrocarril Ponferrada-Villablino y surge de la colaboración entre el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León y el Club Xeitu de Villablino, con el objetivo de recordar, poner en valor y dar a conocer el Ferrocarril Ponferrada- Villablino en el año en el que se cumple su centenario. Esta gran infraestructura ferroviaria levantada por la empresa Minero Siderúrgica de Ponferrada en un tiempo récord, permitió dar salida al carbón extraído del Valle de Laciana y con ello la prosperidad de Villablino y el despegue de una de las zonas mineras por excelencia de la provincia de León. El final de la línea, Ponferrada, vio también cambiar su paisaje natural y humano, convirtiéndose en una urbe industrial, llena de oportunidades y con un incremento de población que parecía no tener fin. Otras muchas fueron las localidades agraciadas por el recorrido ferroviario, que permitió un movimiento de mercancías y personas hasta la fecha desconocido.  

La exposición, comisariada por el historiador e investigador Víctor del Reguero, recoge la historia de este tren, a través de cuarenta y cinco fotografias, algunas de ellas inéditas, un vídeo en super 8 y diversos paneles explicativos. Con vocación itinerante a los lugares principales del Ponfeblino, la muestra es un homenaje a quienes lo hicieron posible, a quienes trabajaron en él y a quienes soñaron viendo las estelas de vapor al paso de sus trenes.  

Patrona de la minería  

La segunda muestra, Bárbara , está dedicada a la figura de Santa Bárbara, patrona de la minería. Comisariada por el historiador e investigador Fernando Cuevas, está dividida en dos secciones. En la primera se muestra a Santa Bárbara que habita en la tierra, ocupa altares en las iglesias de las cuencas mineras, es objeto de culto y veneración por sus habitantes y desciende a lo más profundo de la mina cuando se la necesita. En ella se aborda la figura de Santa Bárbara desde un punto historico y social, con el objetivo de que el visitante descubra quien fue en realidad Bárbara, aquella joven del siglo III d.C. que sufrió en su tierra natal, Bitinia, el martirio de los suyos por abrazar la fe cristiana y como a lo largo de la historia se convirtió en la patrona de los mineros de todo el mundo. Para ello, la sala adquiere un ambiente litúrgico, que invita a conocer con calma la figura de Bárbara y la impronta de Santa Bárbara en los hombres y mujeres del carbón.  

La segunda sección se fija en la Santa Bárbara que habita en el cielo, que inspira artistas y da nombre a miles de mujeres. El museo ha pedido a diez artistas que han colaborado a lo largo de los últimos años en las exposiciones del centro, que aporten una obra a la muestra con su visión particular y actualizada de Santa Bárbara. Participan en ella los escritores Julio Llamazares y Aurelio Loureiro, los pintores Carmen Estébanez y Enrique Guzpeña, los fotógrafos Álvaro Laiz y Eduardo Urdangaray, el muralista Lolo, el grafitero Dados y los artistas Carlos Cuenllas y Eduardo Valderrey. Junto a estas obras, el centro ha hecho un llamamiento para que todas aquellas mujeres llamadas Bárbara, participen en la exposición con su rostro y la historia de su nombre. Con las fotografias recibidas de muchas partes de España y el extranjero y sus historias se ha generado el álbum de Bárbara.  

La exposición Cien años del ferrocarril Ponferrada-Villablino podrá verse durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, mientras que la exposición Bárbara podrá visitarse hasta diciembre.