«Si nos unimos siempre hay posibilidades de desarrollo»

El director general de Caja Rural, Cipriano García, afirmó ayer que «para nosotros hoy es un día importante. Es un orgullo y una satisfacción haber contribuido a poner en marcha un proyecto tan complejo y difícil» como el de Gordonzello allá por mediados de la década de los noventa. Un momento por el que, según reconoció, la caja pasaba por dificultades «y uno de los sitios donde primero vinimos a parar fue a Gordoncillo. El éxito de Gordonzello ha ido de forma paralela al de Caja Rural, lo que demuestra que si nos unimos hay posibilidades de desarrollo siempre».

García subrayó que la filosofía de Caja Rural es «seguir abriendo o manteniendo las oficinas que tenemos».

Veinticinco años de Caja Rural en la provincia de León que, en cierto modo arrancaron en Gordoncillo, con un caminar similar al de Gordonzello. Desde aquel 1994 hasta este 2020 la entidad ha multiplicado su facturación, de estar endeudada ha pasado a ser una de las más saneadas de España y su eficiencia ha crecido de manera muy notable. «Entonces para producir 100 euros teníamos en invertir 70, ahora 44». Caja Rural mantiene la misma filosofía de «acompañamiento inversor de iniciativas de cualquier tipo en nuestro ámbito de influencia», subrayó el director general de la entidad.