Diario de León

Ganadería

Plantean exigir a la industria láctea los daños por el pacto de precios

Los granjeros pueden reclamar aun sin haber entregado su leche a las empresas multadas

Los granjeros pueden reclamar aun sin haber entregado su leche a las empresas multadas

Publicado por
Alberto Domingo
León

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Los ganaderos de vacuno de leche estudian la posibilidad de reclamar daños y perjuicios a las diez industrias lácteas que pactaron los precios de la leche entre los años 2000 y 2013, según quedó patente en una resolución de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) del pasado mes de julio. Aunque no se tratara de las sociedades a las que entregaron su producción, la demanda de los ganaderos leoneses, al igual que la de otros profesionales de distintos puntos de la geografía española, se fundamenta en que las diez sociedades contrataban el suficiente volumen de leche como para alterar el mercado.

Más de medio centenar de ganaderos se reunió la semana pasada con representantes del bufete Redi Abogados, en un encuentro organizado por Asaja-León, en el que expusieron las posibilidades de los granjeros ante la resolución de la CNMC, «pues abre las puertas a que los productores reclamen el daño causado», explicó el abogado Andoni de la Llosa. La firma comprobó que los ganaderos no planteaban acción alguna «porque, al margen de que decidan reclamar o no, nadie les ha informado de que existe un plazo» para reclamar un resarcimiento por el daño causado, motivo por el que entró en estas causas.

Cabe destacar que el bajo precio en origen y la necesidad de concentrar producción para rentabilizar las vaquerías redujeron el número de explotaciones de vacuno de leche de 2.563 a 646 entre los años 2000 y 2013, según datos de la UCCL.

El expediente Industrias Lácteas 2 —que se resolvió definitivamente este mes de julio, una vez que se advirtiera un defecto de forma en el dictamen de febrero de 2015— permite a los ganaderos actuar hasta julio de 2020 mediante, en principio, «un burofax, en el que pedimos tres cosas: que cesen en la conducta» de pactar los precios, como demuestra la CNMC para el periodo 200-2013 «y que estamos convencidos de que aún mantienen, al existir una mayor concentración» en el sector; que no existan represalias contra los ganaderos y que «abonen los daños y perjuicios» causado por distorsionar el mercado, provocando que los ganaderos percibieran un menor precio por su leche.

«Nosotros hemos informado gratuitamente en León de lo que puede hacer el ganadero, que, con esta información, tiene tres opciones: no reclamar, hacerlo con nosotros o con el abogado que elija libremente», señaló De la Llosa. Las pretensiones del ganadero no se resuelven por lo general mediante el burofax remitido, por lo que el caso termina en los tribunales, abundó.

El letrado señaló que el cartel lácteo causó «daños paraguas», como se denominan desde un punto de vista técnico, cuya consideración jurídica «está muy desarrollada en Europa» y permiten plantear acciones para obtener un resarcimiento «aun no habiéndose producido una relación comercial».

En cualquier caso, el proceso «es complejo». No es posible cerrar una cantidad aproximada sobre el dinero que podría suponer si prosperase. «Hace falta una agencia de peritaje internacional», para fijar las cantidades si bien es verdad que la CNMC refiere «un precio a la baja de más de un 10%» como consecuencia del pacto entre las mercantiles. «La ley indica que los cálculos se realicen en un escenario sin el acuerdo fraudulento», así como la comparación con mercados similares, «como Italia y Grecia», en los que la variación de precios con respecto a España en el periodo considerado «ronda el 19%».

Lejos de «calentar a nadie» con cifras, la firma de abogados apunta que, en caso de prosperar, el ganadero recibirá más del 10% de la cantidad que cobró», lo que dependerá en gran medida del tamaño de la explotación. A la cantidad habrá que añadir los intereses de demora «desde el año 2000 hasta la actualidad, que pueden situarse en un 30% del total» que llegara a reconocerse en su caso.

Similar al de los camiones

De la Llosa indicó que pasarán algunas semanas para determinar el número de ganaderos leoneses que se sumen a la reclamación, ya que una vez que deciden reclamar es preciso recabar los datos de entregas de leche y las facturas relativas al periodo 2000-2013. El abogado señaló que el caso «es similar al del cartel de los camiones», que resolvió la Comisión Europea. «Una multa de dos millones de euros parece muy elevada, pero el verdadero problema llega ahora, cuando reclaman empresas con importantes flotas de camiones y cuando lo hacen los ejércitos del Reino Unido o Filandia», con un importante volumen de vehículos adquiridos en condiciones de distorsión del mercado.

 

Las granjas, cerradas también

A la reclamación de daños y perjuicios a las diez industrias lácteas que pactaron los precios entre los años 2000 y 2013 se puede adherir también los ganaderos que, por distintos motivos, hayan dejado la actividad, siempre que entregasen leche durante el periodo citado. Las reclamaciones se extienden por la geografía nacional, con Cataluña como foco de origen. Es en esta Comunidad autónoma donde se ha planteado la primera reclamación, de carácter colectivo, que respaldan 302 ganaderos. A falta de un acuerdo extrajudicial, la Justicia estudia ahora el caso.

 

Una primera multa en 1999

Desde el bufete que se desplazó a León para asesorar a los ganaderos de vacuno de leche en cuanto a una posible reclamación se insistió en que se trata de la segunda multa que la CNMC impone a estas industrias, —ya en 1999 se resolvió el expediente Industrias Lácteas I—. La ganancia de las industrias implicadas en esta segunda ocasión asciende a «815 millones de euros y la multa a 80 millones de euros», cuyo pago «estaba aprovisionado» en las cuentas de las compañías. Es, por tanto, la reclamación de daños y perjuicios la que puede disuadir a las empresas de pactar los precios. La resolución salpica «a los más grandes, a excepción de Mercadona», indicó De la Llosa.

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